El Ayuntamiento de Tavernes de la Valldigna no quiere que, en la medida de lo posible, se trabaje en un día de fiesta local. Por eso, ha denegado la apertura de los supermercados que operan en la localidad el próximo 18 de marzo, es decir, en plenas fallas.
Los caprichos del calendario han provocado que este año, los principales días de las fiestas, 17, 18 y 19, caigan en domingo, lunes y martes. En el caso de Tavernes, eso significa que se juntan tres jornadas consecutivas de cierre de comercios, porque el 18 es, históricamente, fiesta local y el 19, Sant Josep, autonómica. Para evitar esta situación la Asociación de Supermercados de la Comunitat Valenciana (Asucova), que representa a las principales cadenas de valencianas, presentó una solicitud al ayuntamiento para que las dos tiendas de Mercadona y la de Mas y Mas que operan en la localidad pudieran abrir el próximo 18 de marzo. Esta entidad también aglutina a Consum pero la única franquicia que hay en Tavernes tiene menos de 300 metros cuadrados y por lo tanto dispone de libertad horaria.
Lo que pedía la asociación era cambiar este festivo del mes de marzo por otro de diciembre de este mismo año, algo que el ayuntamiento, dentro de sus competencias, ha denegado.
El concejal Josep Llàcer, argumentaba ayer, en conversación con este periódico, que la declaración del 18 de marzo como festivo tiene por objeto, precisamente, que los vecinos del municipio no trabajen. «Entendemos que no es normal hacer ese cambio. Estamos en fallas y mucha gente las vive de manera muy intensa», indicaba. Llàcer también aclaraba que los comerciantes del Mercat Municipal tampoco abrirán durante esos días.
Quienes sí que podrán dar servicio son las tiendas de proximidad. Aquellas que tengan menos de 300 metros cuadrados tienen libertad para abrir sus puertas. El concejal considera que con el servicio que prestan estos establecimientos, si es que deciden abrir, «el abastecimiento está más que garantizado». Se incluyen dentro de esta modalidad pequeños establecimientos de ultramarinos, fruterías, carnicerías, bazares o franquicias cuya superficie comercial no supere el máximo permitido, entre otros.
Esta situación provocará el cierre durante tres días seguidos de todos los supermercados de la localidad, algo prácticamente inédito hasta ahora.
En todo caso, el ayuntamiento ha remitido su decisión a la Generalitat, que es quien dispone de la última palabra. «Si nos obligaran a dejarles abrir un día, nosotros propondríamos que fuera el domingo 17, pero el 18 que es fiesta local, no», señalaba el edil Llàcer.
«El ayuntamiento debe resolverlo»
Por su parte, Pedro Reig, director de Asucova, consideraba que «no podemos estar tres días sin poder dar servicio de productos de alimentación básica». El representante de la entidad apuntaba que están estudiando presentar otra solicitud, que apelaría a lo que se conoce como «acumulación de festivos». «La ley dice que no se puede producir esta situación, por tanto, el ayuntamiento debería resolverlo», señalaba.
En todo caso, reconoce que podrían estar fuera de plazo, por lo que no les quedaría otra que resignarse a acatar la decisión del consistorio. Explicaba, a su vez, que la apertura que habían solicitado para el 18 de marzo era «solo en horario de mañana» El dirigente descarta la opción de abrir en domingo, porque «no queremos abrir el domingo y el 19 de marzo no podemos hacerlo por ley, así que el 18 era el único día».
