Ni las peores previsiones de cara a la temporada estival han frenado este año a las empresas que gestionan los chiringuitos en la playa de Oliva. Hasta nueve de estos negocios operarán durante los próximos meses para ofrecer uno de los servicios preferidos por los turistas no solo en esta, sino en todos los puntos del litoral de la comarca de la Safor.
Los chiringuitos, pese a la incertidumbre generada por la crisis del coronavirus no dan por perdida la temporada por eso en los próximos días empezarán a operar con la normalidad que le permitan las condiciones establecidas para mantener la seguridad de sus clientes.
Desde el pasado 19 de junio está en funcionamiento en Malamar, en la playa de Pau Pi, según informa el departamento de Turismo del Ayuntamiento de Oliva en un comunicado. La previsión es que este fin de semana abran el Llampuga y Kiko Port en la playa de Terranova-Burguera, Kuk Vermell y L'Ambatà en Aigua Blanca, el Replanell, en la playa de Rabdells, y Oliva Nova en Aigua Morta. En los próximos días se inaugurarán Sunset Beach y uno de los más emblemáticos, el Olibaba, que está situado en la playa de Aigua Morta.
Para toda la comarca
Desde la Asociación de Adjudicatarios de los chiringuitos de Oliva han hecho hincapié en la «necesidad» de abrir las instalaciones para dar servicio, «no sólo a los visitantes, sino también a todos los vecinos de Oliva y la comarca, que tienen la playa de Oliva como un referente de ocio en estos meses de verano», indican en el mismo comunicado.
Hace unas semanas, el concejal de Turismo, Joaquín Calafat, mostraba, en conversación con Levante-EMV su optimismo de cara a una temporada que en Oliva no parecía haber pasado factura, puesto que había prácticamente lleno de reservas en lo que a alojamientos se refiere. Esta cuestión también ha animado a los empresarios que gestionan chiringuitos a ponerse manos a la obra y poner en marcha el servicio.
Desde la asociación han agradecido «el enorme y exhaustivo trabajo realizado por Joaquín Calafat, concejal de Turismo y Playas de Oliva, para que estas instalaciones puedan ser finalmente inauguradas», apuntan desde el consistorio.
Incertidumbre
Jose Gómez, representante de la Asociación de Adjudicatarios, por su parte, ha remarcado la «ilusión» y «las ganas» por poner en marcha cada una de las instalaciones. Gómez ha afirmado que «todos sabemos cómo ha ido variando la situación a lo largo de estos meses y la incertidumbre que ha generado la crisis sanitaria respecto al futuro de nuestras instalaciones».
Al margen de Oliva, otros municipios de la comarca de la Safor también tienen una amplia oferta de chiringuitos, como es el caso de Gandia, que ofrece una decena de establecimientos de este tipo a lo largo de toda la costa.
