«La educación nos acompaña durante toda la vida». Esa es la premisa a partir de la cual el Ayuntamiento de Oliva ha puesto en marcha el proyecto «L’Espiral de la Vida». Se trata de plasmar en una escultura esa idea de que la educación es eje central del desarrollo humano, desde edades muy tempranas hasta la vejez. Por ese motivo, el departamento que dirige la concejala socialista y vicealcaldesa, Ana Morell, ha implicado tanto a la comunidad escolar como a las personas más mayores de la ciudad, aquellas que cumplen 100 años en este 2022 o las que superen esa edad en estos momentos.
La propuesta se materializará en un diseño que presidirá la nueva plaza de la avenida de València, que llevará el nombre de Rectora Mavi Mestre, natural de Oliva y primera mujer en ostentar el cargo en la historia de la Universitat de València. Eso permitirá que las réplicas en acero de las manos de todas las personas que las cedan se conviertan en patrimonio de Oliva.
El encargado de crear la obra es el artista de Tavernes de la Valldigna Jesús Marín-Lorente «Chule». Para su elaboración contará con la colaboración de los y las escolares de la ciudad, que aportarán las siluetas de sus manos, que se unirán después en ese gran espiral de la vida.
El objetivo es contar con una representación de manos de personas de todas las etapas de la vida, por lo que el departamento de Educación ha decidido implicar también a aquellas personas que cumplan 100 años o superen esa edad que quieran participar.
El pasado domingo, «Chule» se desplazaba hasta la casa de Juan Vicens Escrivà, que acaba de cumplir el siglo de vida, para grabar en una chapa metálica la silueta de sus manos ,que después moldeará en acero para incluirlas en el diseño final de la escultura.
El propio «Chule» explica a Levante-EMV que en unos días acudirá a casa de una vecina que tiene 103 años para hacer el molde de sus manos, que junto a las del resto de centenarios y centenarias culminarán la obra.
Es necesario explicar el diseño para entender el concepto. La escultura está formada por diez estatuas humanas que representan los pilares de la educación en Oliva, o, lo que es lo mismo, los centros educativos de todos los niveles que existen en Oliva.
Estas estructuras sostienen la espiral, formada por las manos de los y las escolares, personas de la tercera edad que acuden a recursos educativos del municipio, las de la propia Mavi Mestre y, para coronarla, las de las personas centenarias.
De abajo a arriba, para completar la espiral, «Chule» colocará las manos de menor a mayor edad, simulando cómo, efectivamente, la educación acompaña durante toda la vida, como se aprecia en el boceto que acompaña esta información.
Para su elaboración se utilizará acero inoxidable, ya que el diseño se instalará en el interior de una fuente, mientras que las manos estarán elaboradas con acero corten, según explicaba ayer el autor.
En estos momentos, el artista ya ha esculpido en su taller de Tavernes las manos de Juan Vicens y a lo largo del verano trabajará en este proyecto. Hace unas semanas, «estuvimos en un acto en La Nau de València, donde tomé la silueta de las manos de Mavi Mestre, que también se incluirán en la escultura», explicaba Marín-Lorente.
El objetivo, según explicaba por su parte Ana Morell, es inaugurar la escultura el próximo mes de noviembre. «En estos momentos estamos trabajando en recoger las manos de las personas mayores y cuando empiece el curso en septiembre empezaremos con los niños y las niñas».
Ana Morell señalaba que en la iniciativa participarán más de 500 escolares de la ciudad, que, con su aportación, permitirán contar con un espacio, la plaza de la Rectora Mavi Mestre que busca ser un homenaje a la educación en todo su conjunto centrándose en la figura de Mestre.
