El posible pacto electoral con Alandete rompe el colectivo dels Verds de Gandia

El portavoz Miguel Rodilla y otras 8 personas dejan la Ejecutiva acusando a Joan Francesc Peris de actuar sin tenerlos en cuenta. Pilar Miró responde que no han acudido a las reuniones y asambleas y ratifica que habrá lista en las municipales

Miguel Rodilla, Joan Francesc Peris y otros dos miembros de Compromís, en una imagen de archivo.

Miguel Rodilla, Joan Francesc Peris y otros dos miembros de Compromís, en una imagen de archivo. / Levante-EMV

T.Á. Casanova/S. Sapena

El colectivo local de Els Verds de Gandia, una formación cuyo cartel más representativo es el de Joan Francesc Peris, se ha roto a consecuencia de las negociaciones abiertas para formar una candidatura a las próximas elecciones municipales con el actual vicealcalde de la ciudad, Josep Alandete, que sigue en Compromís pero que ya está más fuera que dentro de esa formación.

La crisis en Els Verds es de un enorme alcance porque ha dimitido otro referente muy visible, el profesor Miguel Rodilla, que ejercía de portavoz en la Ejecutiva, y otros históricos del colectivo, como el exconcejal Joan Lluís Soler. En total son nueve los cargos que dejan la dirección, dos terceras partes del total.

Miguel Rodilla señala a este periódico que el argumento de esa decisión colectiva, anunciada en la madrugada de este jueves, son «las formas» en que Joan Francesc Peris, que es secretario de Organización, ha llevado el partido en los últimos meses, y más concretamente en el hecho de que «no podemos sentirnos cómplices de decisiones en las que no hemos participado». «El partido ha estado en manos de Peris, que ha adoptado decisiones absolutamente unilaterales», remarca el profesor y biólogo en declaraciones a este periódico.

Entre otros aspectos, Revilla reprocha a Peris su negativa a abrir una negociación con Compromís de Gandia y abordar la invitación de esta coalición para integrarse en una candidatura para las municipales en la que ya están Esquerra Unida y Podemos. «Yo creo que lo lógico habría sido estudiarlo y sentarnos a hablar», añade Rodilla en referencia a esa invitación de Compromís porque, según estima, «preferimos un gobierno progresista en la ciudad y eso se puede conseguir más fácilmente con y una confluencia amplia de partidos de izquierda».

Frente a eso, lo que Els Verds ha estado barajando y negociando es una candidatura en la que estaría Josep Alandete, el vicealcalde apartado de Compromís, y otras formaciones de izquierda, lo que ha desembocado definitivamente en la crisis interna.

La otra parte de Els Verds rechaza y niega esos argumentos. Pilar Miró, secretaria de Organización Federal, asegura que en las últimas reuniones y asambleas del partido se ha dado cumplida información de las negociaciones y de las preferencias para concurrir a las elecciones municipales. Allí, asegura Miró, se informó primero del rechazo a integrarse en la candidatura de Compromís-EU-Podemos y, en segundo lugar, de entablar conversaciones «con otras fuerzas». «El problema es que quienes ahora anuncian dimisiones no han acudido a las dos o tres últimas asambleas y tampoco han excusado su asistencia», remarca Pilar Miró, quien lamenta que no haya sido en los órganos del partido donde expresaran sus planteamientos. De hecho, la pasada semana la asamblea de militantes volvió a ratificarse en la búsqueda de acuerdos con otras formaciones para concurrir a las urnas.

A preguntas de este periódico, la secretaria de Organización Federal insistió, como también lo ha hecho Joan Francesc Peris en sucesivas ocasiones, que Els Verds «se presentará a las elecciones en solitario o con otras formaciones», y que se están llevando a cabo contactos, también con Josep Alandete y las personas que le apoyan, pero que no se ha cerrado ningún acuerdo.

Un giro que dificulta la posibilidad de tener concejal

En Gandia, dependiendo de la participación en las elecciones, la obtención del primer concejal se sitúa en el entorno de los 1.800 votos. Por eso, quienes negocian la posibilidad de que el sector de Compromís afín a Josep Alandete acuda en una lista con Els Verds y otras formaciones, entre las que se había planteado un acuerdo con Esquerra Republicana, contaban votos y llegaban a la conclusión de que era posible alcanzar el objetivo si eran capaces de desarrollar una buena campaña electoral.

Lo ocurrido ahora, en cambio, supone un giro, inesperado para algunos, previsible para otros, que dificulta mucho alcanzar el mínimo de apoyos para entrar en la próxima Corporación municipal. 

El voto es, obviamente, de cada ciudadano, pero la crisis abierta en Els Verds y la cantidad de personas que han secundado las dimisiones en la Ejecutiva complican esa imagen de unidad de la izquierda que se pretendía dar.