Efe, Valencia

El grupo parlamentario socialista pedirá que el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Gerardo Camps, explique ante las Cortes Valencianas las garantías de seguridad que tiene el Palau de les Arts y tranquilice a los ciudadanos ante la falta del informe de bomberos ante emergencias.

Asimismo instará a la Generalitat a que cumpla en los recintos públicos las mismas cuestiones administrativas y de seguridad que exige las empresas privadas que quieren iniciar una actividad, y garantice que los ciudadanos «se sientan seguros» en ese espacio.

Así lo anunció el diputado socialista José Camarasa, quien compareció junto al portavoz municipal socialista, Rafael Rubio, en una rueda de prensa para analizar la situación administrativa del edificio diseñado por Santiago Calatrava e inaugurado el sábado por doña Sofía.

Según Rubio, el segundo concierto de inauguración del Palau de les Arts, celebrado anoche, se realizó sin la correspondiente autorización, al no disponer el recinto de licencia de actividad y ni del informe de bomberos.

El concejal socialista destacó que para el concierto inaugural del pasado sábado, el Ayuntamiento y la Generalitat se «cubrieron las espaldas» al considerarlo un «acto institucional de carácter público» y, por tanto, excluido de la Ley de Espectáculos Públicos.

Explicó que en 1997, la Ciudad de las Artes y las Ciencias (CACSA) solicitó la licencia de obras para un recinto que, según Rubio, «no es igual al que finalmente se ha construido», y destacó que ésta es la «única licencia» que ha entregado el consistorio, ya que no ha otorgado ni la de primera actividad ni la de actividad. Asimismo señaló que el pasado 13 de septiembre se remitió a Cacsa el informe realizado por el servicio de bomberos sobre el proyecto presentado, pero este cuerpo todavía no ha realizado una inspección del edificio para comprobar las medidas de seguridad. Rubio manifestó que, días antes de la inauguración, al consistorio «le entró miedo escénico» y se negó a otorgar la licencia de actividad, acogiéndose al contenido de un decreto de 1968 por el que se regulan las actividades molestas, insalubres, nocivas y peligrosas en las zonas de dominio público y sobre actividades ejecutables por órganos oficiales. De esta forma, el Ayuntamiento entiende que es la Comisión Provincial de Actividades Calificadas quien debe pronunciarse sobre la concesión de licencia. Rubio indicó que, tras esta decisión, la conselleria emitió el viernes un expediente en el que considera que el acto de presentación «no precisa de la autorización de las administraciones públicas competentes en materia de espectáculos públicos», al tratarse de «un acto institucional de carácter público». Rubio indicó que esa excepción sólo afectaría al acto del día 8, por lo que el concierto del día 9 y los de los próximos días 24 y 25 se celebrarán sin la correspondiente actuación.