Efe, Valladolid
El jurado de la sección Tiempo de Historia, de la Seminci de de Valladolid, compuesto por la actriz y periodista María Casanova; la historiadora María Luisa Martínez de Salinas y el cineasta y profesor Juan Millares, concedió el primer premio a Las alas de la vida, del valenciano Antoni P. Canet, dotado con 12.000 euros.
El jurado justificó su fallo en la «sensibilidad» con que el trabajo «aborda la dureza de una situación en la que el protagonista demuestra una enorme generosidad y una inteligencia que van a la par con el talento cinematográfico del realizador», quien a su juicio invita a la reflexión sobre el sufimiento, el dolor y la dignidad.
La cinta ahonda en la lucha del doctor Carlos Cristos, un paciente aquejado de atrofia sistémica múltiple, una enfermedad degenerativa que hace reflexionar al protagonista sobre la dignidad de la muerte a través de los ojos de Toni Canet, amigo de Cristos y testigo del deseo de éste de abadonar este mundo «si es posible, con una sonrisa».
Espigas de Oro y Plata
El máximo galardón del festival, la Espiga de Oro, fue para la película serbia Optimisti, de Goran Paskaljevic, y la Espiga de Plata a la iraní Zemestan (Es invierno), del director Rafi Pitts, dotados con 35.000 y 17.500 euros, respectivamente.
Por su parte, Laura Linney se alzó con el premio a la mejor actriz por su interpretación en la australiana Jindabyne, dirigida por Ray Lawrence, donde interpreta a una mujer que se enfrenta a la desagradable realidad de una desgracia y a un matromonio en crisis.
El premio a la mejor Dirección de Fotografía recayó en Mohammad Davoodi por Zemestan (Es invierno) mientras que el de la Mejor Música, constituido por primera vez en esyta 51 edición, fue para Paul Kelly y Dan Luscombe por Jindabyne.
Por su parte, el largometraje del argentino Hernán Gaffet, Ciudad en celo, que versa sobre la historia tres amigos que se enfrentan a los 40 a través de un viaje al presente de los recuerdos del pasado, fue premiado con el galardón «Pilar Miró» al mejor nuevo director.
