Una mujer mata a su hijo discapacitado y después se quita la vida en un hotel de València

La mujer, de 54 años, y el hijo, de 25 y con síndrome de Down, fueron hallados muertos en la habitación donde estaban alojados desde el miércoles

La Policía analiza el potente tóxico que la mujer usó para el doble envenenamiento e investiga si ella padecía una enfermedad grave

Una mujer mata a su hijo discapacitado y se suicida en un hotel de València

Una mujer mata a su hijo discapacitado y se suicida en un hotel de València / Germán Caballero / A. Iranzo

María González

La Policía Nacional y la jueza de Instrucción número 16 de València, en funciones de guardia, investigan la muerte de un joven de 25 años y con síndrome de Down a quien supuestamente habría matado su madre, de 54 años, quien después se quitó la vida utilizando el mismo método: la ingesta de un potente veneno disuelto en agua, para ella, y en yogur, para él. Los hechos, tal como adelantó ayer en exclusiva Levante-EMV, han sucedido en la habitación de un conocido hotel de la ciudad de València, ubicado en la avenida de las Corts Valencianes, en el que ambos se habían registrado este miércoles pasado.

Según los primeros datos de la investigación, el homicidio seguido del suicidio de su autora se produjo la misma noche en que llegaron al establecimiento, a juzgar por el estado en que fue encontrada la estancia, con la cama sin deshacer y ambos aún vestidos con ropa de calle.

El trágico suceso no ha sido descubierto hasta que los empleados del hotel entraron a primera de la tarde de este viernes en la habitación, la 705, en la séptima planta del establecimiento, alertados porque los clientes llevaban más de 48 horas sin salir de la estancia y sin dar señales de vida.

La mujer, L. M. C., de 54 años de edad, y el hijo, J. M. G. C., de 25 años y con discapacidad psíquica, habían llegado este miércoles al hotel y desde ese momento, nadie había vuelto a verles.

El hallazgo de los cuerpos ha tenido lugar a primera hora de la tarde de este viernes, después de que el personal del establecimiento acudiese a la habitación 705, alertados por la falta absoluta de noticias de los ocupantes. Según ha podido saber este periódico, el hijo estaba tendido sobre la cama y la mujer estaba en el suelo, a los pies del joven.

Investigan si padecía una enfermedad grave

Ambos son de origen colombiano y de momento no ha trascendido su lugar habitual de residencia y por qué la mujer decidió registrarse en ese hotel de València para llevar a cabo su acción homicida y suicida, cuya motivación trata ahora de averiguar la Policía Nacional a partir de la reconstrucción de sus pasos y de la averiguación de su entorno familiar, ya que L. M. C. no ha dejado ninguna nota explicando los hechos.

Una de las hipótesis que se barajan es que sufriera una enfermedad grave y que ella fuese la única cuidadora del chico, a quien habría causado la muerte convencida de que nadie se haría cargo de él si ella moría

La habitación permanece precintada hasta que concluya la investigación policial. Nada más descubrir los cuerpos sin vida de madre e hijo, un responsable del hotel llamó al 112, lo que puso en marcha el protocolo de muertes violentas. La Policía Científica ha realizado una inspección ocular de la habitación, de donde recogieron los restos del tóxico fulminante utilizadao por L. M. C. para causar la muerte de su hijo y la suya propia.

Se trata de una sustancia blanca en polvo que llevaba en una bolsa de plástico, y que la Policía analiza para averiguar de qué se trata. Además, en la estancia había una botella de agua con mezcla de la misma sustancia, así como envases vacíos de yogur, por lo que todo apunta a que ella tomó el veneno disuelto en líquido aunque a su hijo se lo habría facilitado con los lácteos para atenuar el sabor.

Los cadáveres fueron trasladados cerca de las seis de la tarde por orden de la jueza de guardia al Instituto de Medicina Legal (IML) de València, donde un equipo de forenses comenzará este sábado las autopsias para confirmar, como aparenta, que ambos han muerto envenenados.

El grupo de Homicidios de la Policía Nacional ya se ha hecho cargo de la investigación, para cuya resolución será importante no solo la inspección ocular de la estancia, sino también las declaraciones que presten los allegados a las dos víctimas.