Hay dos alimentos que no son demasiado conocidos todavía, pero que en cuanto los pruebes y sientas sus beneficios, se convertirán en tus favoritos. Son el té matcha y la baya de açai.
El té matcha es elogiado por su contenido antioxidante y elevado valor nutricional. Se conoce como uno de los secretos mejor guardados por los monjes Zen, ayuda a prevenir el envejecimiento y contribuye a la pérdida de peso. De composición natural y ecológica, puedes tomarlas cuando quieras cuidarte y sentir las propiedades de sus ingredientes.
La baya de açai tiene una relación directa con la pérdida de peso de manera saludable, además de ser una fuente de antioxidantes exquisita. Si tu propósito es mantener la línea, es bueno que incorpores a tu dieta esta baya brasileña procedente del amazona. Sus propiedades son increíbles: es energizante, antioxidante y un digestivo natural.
¿Por qué la baya de Açai ayuda a bajar de peso?
Al consumirla regularmente ayuda a largo plazo a que el cuerpo no acumule grasas, pues su nivel de antioxidante es alto. Su contenido nutricional incrementa la energía de nuestro cuerpo y evita que ganemos peso.
Contiene antioxidantes, lo que contribuye a desintoxicar el cuerpo regulando el metabolismo de una forma natural para bajar de peso y vivir sanamente.
Ayuda a la digestión gracias a la presencia de grasas monoinsaturadas para mejorar el tránsito intestinal. La fibra ayuda a tener una sensación de saciedad y comer menos para bajar de peso, ayuda a equilibrar el colesterol y el contenido de azúcar en la sangre.
La manera de consumirla es muy sencilla. Mis preferidas son en smoothie, añadiendo un par de cucharadas en polvo, o en ensalada o yogur con cereales donde añado unas 8 bayas de açai. Está riquísimo y ya veis los grandes beneficios que aportan a la salud.
Un superalimento
El té matcha es uno de mis superalimentos favoritos. Previene el envejecimiento por su alto contenido en antioxidantes, ayuda a perder líquido y con ello, a bajar de peso y a reducir la inflamación. Lo mejor de todo es que es muy rico en un aminoácido, L-carnitina, que como sabéis acelera el metabolismo y ayuda a quemar grasas. Y no sólo eso, es una fuente de energía maravillosa que al mismo tiempo relaja. Yo lo describo como una especie de «subidón buenrrollero» cuando lo tomo.
No tiene nada que ver con los efectos del café, que alteran el sistema nervioso y acumulan toxinas en nuestro organismo debido a los torrefactos. Un vaso de té matcha equivale a diez vasos de té verde en contenido en antioxidantes y valor nutricional.
Yo suelo empezar el día con un té matcha late, es decir, un vasito de leche de soja, almendra, arroz… con una cucharadita pequeña de matcha. No hay que pasarse con la cantidad, no olvidemos que lleva teína y un exceso podría desvelarnos demasiado.
Esta variedad tiene la capacidad para ayuda a reducir el estrés, estimular las defensas, reducir el colesterol y combatir el cáncer. Es el secreto mejor guardado de los monjes tibetanos y uno de los causantes de la longevidad de la población oriental.
Te animo a que destierres el café de tu vida y lo sustituyas por este magnífico superalimento.
