Cincuenta y nueve días después, Álvaro Negredo ha vuelto a tener contacto con el balón. Y su sonrisa, ayer al mediodía , no podía ser más reveladora. El debut con el Valencia está más cerca. El jugador, tras ejercitarse en el gimnasio, saltó al césped de la conocida como «jaula», se calzó las zapatillas de deporte (azules con la suela roja) y empezó a empujar lentamente la pelota mientras corría. Al experimentar buenas sensaciones, y supervisado el trabajo por el jefe de los servicios médicos Juan Albors y el recuperador Jordi Sorlí, el delantero realizó carrera en zigzag unos conos delimitaban el espacio donde impulsaba la pelota con el interior del pie derecho.

La recuperación, apuntan, avanza a buen ritmo. El jugador se ha marcado como fecha para la reaparición el partido contra el Deportivo de La Coruña del fin de semana del 18-19 de octubre. Pero mira de reojo, aunque lo ve «justito», el encuentro contra el Atlético de Madrid que el 4 de octubre se disputará en Mestalla el partido que, todo apunta, hará su aparición en escena Peter Lim. El jugador y los médicos, eso sí, subrayan que debutará cuando la fractura esté totalmente «olvidada» ya que si no se suelda perfectamente, puede reproducirse o acarrear dolores. Precaución que contrasta con el entusiasmo mostrado por Nuno Espirito Santo el pasado sábado cuando sorprendía al avanzar que «Álvaro volverá más pronto de lo que pensábamos» y ensalzaba la «automotivación» del jugador por acortar plazos. «Tenía previsto reaparecer a principios de octubre pero yo lo veo antes», descubría el técnico.

Negredo se lesionó el 19 de julio en un partido amistoso de pretemporada contra el Hearts escocés cuando todavía militaba en las filas del Manchester City. Tres días después, el delantero pasó por el quirófano para solucionar la fractura sufrida en el quinto hueso metatarsiano del pie derecho y los servicios médicos del club inglés estimaron entre dos y tres meses de baja. Los plazos, aunque se ha modificado el plan inicial diseñado por los médicos ingleses, se mantienen. Y es que, paralelamente a superar la lesión, el jugador está realizando ejercicios propios de una pretemporada para poner «a tono» todo su cuerpo para el esfuerzo que supone competir.

Una sesión de lo más distendida

En todos los entrenamientos la protagonista es la pelota. Ayer en la vuelta al trabajo, mientras los titulares de la victoria contra el Espanyol realizaban ejercicios de recuperación, el técnico dividió el resto de grupo en dos equipos para trabajar la circulación de balón. Por una parte Cancelo, Feghouli, Gil, Orban y Augusto y, por otra, Pereira, Mustafi, De Paul y Zuculini. A continuación se trabajó en duelos la presión Mustafi/Feghouli, Zuculini/Augusto, Gil/Pereira, De Paul/Cancelo y Orban/Rober y acabó el trabajo con un partidillo en el que Feghouli marcó un golazo.