El expresidente del Valencia CF, Vicente Soriano, declaró ayer en el Juzgado de Instrucción número 3 de Valencia acusado de un presunto alzamiento de bienes. La denuncia contra el exdirectivo del Valencia CF la dirige una empresa del entorno de Juan Soler, también expresidente del club, que litigan desde hace años por el pago de una deuda de 85,5 millones de euros, por la transacción entre ambos de 70.000 acciones de la entidad valencianista.

Soriano negó ante el magistrado el presunto delito de alzamiento de bienes (ocultación del patrimonio para no afrontar una deuda) que le imputa la denuncia. Incluso negó la mayor, la deuda que reclama Soler por la venta de acciones, y achacó a «maquinaciones» las acusaciones dirigidas contra él, según explican a Levante-EMV fuentes jurídicas.

De hecho, Soriano también rechazó de plano las informaciones vertidas en los informes elaborados por una agencia de detectives que aseguran haber hallado cuentas en el extranjero a nombre del presidente de la entidad valencianista entre 2008 y 2009. El mismo detective aún tiene pendiente de aportar a la causa más informes sobre las cuentas de Soriano. Ambos expresidentes litigan desde hace años por el pago de la deuda del paquete accionarial y protagonizaron un truculento episodio, por el presunto secuestro de Soriano ordenado por Soler para poder cobrar, que finalmente fue archivado.