«Recuperar el ‘ADN’» fue la primera declaración de intenciones con la que llegó José Bordalás a Mestalla. Lo dejó claro en su primera intervención como entrenador blanquinegro: ser competitivo pasaba por tener una identidad definida, por ser un equipo reconocible y conectado con las históricas señas de identidad del Valencia. El arranque liguero no dejó dudas en este sentido, el conjunto valenianista cosechó diez puntos de doce posibles superando a sus rivales en intensidad y con una presión asfixiante. Desde entonces el equipo no ha vuelto a ganar y aunque no ha dejado ser un equipo intenso y combativo, ha rebajado un punto la agresividad.
Los datos referentes a faltas cometidas son muy reveladores. En el Camp Nou solamente realizó 13 y el FC Barcelona acabó jugando muy cómodo. Entre Soler, Hugo Duro, Guedes y Maxi Gómez solamente hicieron tres faltas y fueron todas del atacante charrúa. El equipo elevó el bloque para taponar la salida culé, pero le faltó algo de mordiente a la hora de ‘apretar’ al poseedor del balón.
Lo de Barcelona no fue un caso aislado, la correlación entre faltas efectuadas y buenos resultados está siendo casi total. El Valencia CF ha cometido más infracciones que su rival solamente en dos de los nueve partidos disputados hasta el momento y los dos se saldaron con victoria (contra Getafey contra Deportivo Alavés) y solamente ha ganado a Osasuna perdiendo la batalla en este parámetro estadístico. Contra el Real Madrid hizo las mismas (14) y lo cierto es que a pesar del accidentado final que tuvo el partido, el cuadro de Bordalás firmó una de sus mejores actuaciones dando una imagen de equipo reconocible y que sabe muy bien a lo que juega.
Desde la injusta caída contra el cuadro madridista, el Valencia ha hecho siempre menos faltas que sus contrincantes y no ha ganado ningún partido. Salvo en Sevilla el Valencia no ha dejado de competir en ninguno de partido, pero le han faltado detalles y un punto más de agresividad para acabar de superar a sus rivales y cosechar resultados más positivos.
A pesar de que el equipo vive su momento más complicado de la temporada, la mejor noticia es que conoce el camino de regreso a los buenos resultados porque ya ha ofrecido una buena versión de sí mismo esta campaña. En hacer hincapié en la mordiente a la hora de presionar e imprimir intensidad a los duelos (solamente ha ganado más que su rival en tres partidos y dos de ellos los ha ganado). acompañado por la recuperación de efectivos importantes puede estar una de las claves principales de la vuelta a la senda de la victoria.
