Sandra Gómez, vicealcaldesa de València y concejal de urbanismo, analizó las claves del encuentro que mantuvo con Layhoon, expresidenta del Valencia CF y mano derecha de Peter Lim, el pasado lunes. «La reunión se engloba dentro de un marco de normalidad institucional porque sobre todo, ella como representante del Valencia CF quería conocer de primera mano el punto el punto jurídico en el que se encuentra la ATE», explicó ayer en el acto de presentación del Plan de Sostenibilidad Turística.

Lo cierto es que se trató de una nueva cita en la hoja de ruta de Layhoon, que ha vuelto a la ciudad como la ‘última bala’ de Meriton para desatascar la situación del Nou Mestalla.

«Desde nuestro punto de vista, le trasladamos lo que manifestamos siempre en público y en reuniones con la propiedad del club. Para nosotros es absolutamente innegociable e imprescindible, que si la propiedad del club quiere mantener los derechos y los beneficios de las plusvalías urbanísticas de la ATE, deben cumplir con las obligaciones que se constituyeron en la ATE», manifestó.

Asimismo, recordó los dos requisitos que debe cumplir la entidad para conservar los beneficios: «Si la propiedad quiere hacer uso de todos los derechos que tienen una rentabilidad económica directa, lo primero es cumplir con las obligaciones. Y para nosotros, hay dos innegociables. En primer lugar, tener un estadio de 70.000 espectadores preparado para poder acoger cualquier tipo de competición nacional e internacional. Ese compromiso se adquirió en 2015 y Meriton lleva en el club desde 2014. La propia presidenta era Layhoon y es conocedora de los compromisos adquiridos. Y en segundo lugar, la necesidad de desarrollar el Polideportivo Municipal de Benicalap para compensar con la enorme pérdida que sufrieron los vecinos al «ceder su territorio» al club en el pasado.

Por otro lado, instó al resto de instituciones a exigir que se cumplan estos acuerdos: «Lo único que espero es que todos los responsables jurídicos estén en la línea de firmeza, de exigir lo que se pactó. No se puede aceptar cualquier cosa, o proyecto que sea o signifique incumplir los acuerdos, no se pueden aceptar proyectos que pongan encima de la mesa un estadio del mismo aforo o más pequeño del actual Mestalla. No hay nadie que pueda defender que hemos de conformarnos con un estadio de 40.000 espectadores», expresó.

Contundente, además, aseguró que «la ATE está caducada y esto es una premisa indiscutible», si bien «la propiedad podrá mantener las condiciones si cumple».

Además, la vicealcaldesa también recordó que desde el Ayuntamiento siempre se involucraron con el club «para ayudar en la financiación» y aseguró que «la ciudad tiene un gran interés en que haya un estadio capaz de atraer eventos interesantes». «El acuerdo es lógico, ya que garantiza el futuro del club, la posibilidad de financiar el estadio y que València tenga un campo que sea competitivo, atractivo y que genere eventos más allá del fútbol».

Por último, Sandra valoró la reunión como «normal» y recordó: «Queremos acabar el estadio». En este sentido, matizó. «El club está en condiciones de acabarlo con CVC y con las posibilidades si cumplen con lo suscrito en la ATE».