H. García, Valencia

La Dirección General de Patrimonio de la Conselleria de Cultura puso hasta doce condiciones al proyecto de restauración de los puentes históricos de Trinidad y de Serranos promovida por el Ayuntamiento de Valencia y dirigida por Ignacio Bosch. El citado departamento autorizó en mayo de 2006 la propuesta de intervención del arquitecto si bien estableció, en Serranos, siete condicionantes y cinco en el de la Trinidad. Patrimonio exigía autorización "expresa" para la reposición de la escalera de Serranos que finalmente no ha tenido cabida en la restauración. El visto bueno se condicionó a que la parte a recrear fuese lo más reducida posible.

La pavimentación "con granitos y piedras naturales" prevista en la autorización de Patrimonio para los puentes más antiguos de la ciudad parece no haberse tenido en cuenta a la luz de la capa de asfalto que se ha puesto en las aceras de Trinidad y Serranos.

Evitar el exceso de contraste de la piedra

Patrimonio reclamó que en la limpieza del puente de la Trinidad "la transición entre la conexión del puente y el pretil se realizase de forma gradual"; que informasen previamente de los sistemas de consolidación de la piedra e hidrofugación; que la limpieza de la fábrica se realizara antes de abrir las juntas para preservarlas; y que el desmontaje de los peldaños de las dos escaleras se valorase tras la limpieza.

En Serranos, donde se han reconstruido los arrimaderos y la bajada de carruajes, las limitaciones eran mayores, ya que Patrimonio exigía autorización expresa para la pavimentación tras efectuarse las pruebas con granitos y piedra, para la bajada de carruajes y para la escalera.

También se solicitó información previa de los sistemas y materiales para la consolidación y limpieza, que se protegieran las juntas de mortero preexistentes y que se evitara en la limpieza el exceso de contraste entre el pretil y los puentes. Patrimonio pide que la nueva iluminación del puente de Serranos "no interfiera en la actual iluminación de las Torres de Serranos", que gozan del máximo nivel de protección. En el caso de Serranos se exige también autorización expresa para "la solución final". El departamento de Paz Olmos no aclaró ayer si las condiciones iniciales se han modificado.