La Oficina Municipal de Devesa-Albufera presentó ayer un mapa con los 103 «tancats» que hay en el entorno del lago, terreno ganado al agua en los siglos XIX y XX mediante los históricos aterramientos que tan bien retrató Vicente Blasco Ibáñez. Entre todos suman cerca de 5.200 hectáreas, lo que supone el doble de la superficie actual del lago, que es de 2.800, y la tercera parte del arrozal, que totaliza 14.000 hectáreas, lo que da una idea de su importancia para el parque y para el ecosistema.
A la presentación de este mapa, que por primera vez recoge todos los «tancats» con sus respectivos nombres y ubicación, asistió la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, junto con los concejales Vicente Aleixandre y María Àngels Ramón-Llin, responsables del parque y del Ciclo Integral del Agua respectivamente. También acudieron decenas de alcaldes pedáneos, arroceros y «motoristas», que son los responsables de los motores que se encargan, desde los propios «tancats», de sacar el agua cuando es necesario.
El jefe del servicio de Devesa-Albufera, Ángel Maruenda, explicó como gran virtud del nuevo mapa el hecho de que todos los «tancats» tengan su nombre, que generalmente son los que les ha puesto la gente que los frecuenta. Y resaltó la importancia del arrozal para el equilibrio del parque.
Por su parte, Barberá recordó el trabajo de su equipo de gobierno para conservar este ecosistema e invitó a los alcaldes ribereños que aún no se han sumado a la petición para que la Albufera sea declarada reserva de la Biosfera a que lo hagan.
