«El dinero que pagaron los agentes urbanizadores para el soterramiento de las vías del tren en Serrería fue al presupuesto municipal, como ingreso, y se ha gastado», aseguran fuentes del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Valencia, que ha presentado todo tipo de iniciativas en los últimos años para aclarar el destino de este dinero.
El concejal de Urbanismo, Alfonso Novo, admitió en febrero de 2013, que el ayuntamiento recibió «328,5 y 903,5 millones de pesetas, aceptados por la comisión de Gobierno de 24 de marzo 1995, como carga financiera para financiar el soterramiento de la vía férrea Valencia-Tarragona en el área bajo el jardín del Turia». Igualmente, «el urbanizador del PAI Moreras II ingresó 2 millones de euros, asentado el ingreso en intervención el 12 de abril de 2002», señala Novo en respuesta a las preguntas presentadas por el concejal socialista, Vicent Sarrià. Sin embargo el equipo de gobierno no aclara cuál ha sido el destino de todo este dinero, que finalmente suma 9,4 millones de euros adelantados para pagar un soterramiento que nunca se ha producido. Levante-EMV intentó ayer recabar la versión del concejal de Urbanismo, Alfonso Novo, sin éxito.
Sobre la aportación del primer agente urbanizador a la urbanización de la avenida de Francia, desde el PSPV recuerdan que «una parte se pagó a Renfe, para pagar el desvío de la catenaria, por lo que se deduce que sí que había voluntad de llevar a cabo el proyecto», explican fuentes del grupo socialista. Sin embargo, lamentan, «nunca se ha firmado un convenio con el Ministerio de Fomento porque la alcaldesa cuando gobernó Aznar, de 1996 a 2004, jamás reivindicó esta obra ni la firma de un convenio que la facilitara». Barberá «sólo se acordó del soterramiento durante la etapa de Zapatero, de 2004 a 2011, ya que lo reclamó varias veces, aunque cuando presentábamos mociones, como en 2010, pidiendo que se redactara un borrador de convenio donde figuraran las aportaciones de cada administración y de los particulares, nunca accedió a la propuesta».
Si se llegara a firmar este convenio con la administración central algún día, «sería responsabilidad del ayuntamiento reintegrar los 9,4 millones de euros», advierten desde el grupo municipal socialista. «Pero si no se hiciera el soterramiento los agentes urbanizadores podrían reclamar este dinero porque, en sus convenios urbanísticos, sí que figura que estas cantidades se abonaron para este concepto y tienen un destino finalista».
El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Valencia añade, por último, que el equipo de gobierno «tampoco ha explicado nunca las razones por las que la Generalitat no ha pagado su aportación al soterramiento». Novo se limitaba a asegurar, en la misma respuesta de febrero de 2013, que el PAI Moreras I «es un programa de promoción autonómica que tramitó la propia conselleria», pero no especificaba qué cantidad debía abonar para el soterramiento del túnel de Serrería y si lo había hecho.
