La seguridad del Ayuntamiento de Valencia redujo y detuvo ayer a un hombre que trataba de acceder al consistorio con una pistola de detonación y balas de fogueo. Se trata de un arma que a corta distancia puede producir graves quemaduras a las personas, según dijeron fuentes conocedoras del caso.

Con esta detención, la seguridad del Ayuntamiento de Valencia ha pasado una prueba de fuego. Desde que se permite la visita de los ciudadanos se ha cuestionado el sistema de seguridad y el despliegue policial. También la efectividad del arco de metales. Pero en el día de ayer, los agentes de la policía local que realizan este servicio detectaron y redujeron a un hombre que intentaba pasar con una pistola de fogueo.

Aunque en principio no se trata de un arma reglamentaria, este tipo de pistolas puede causar graves heridas si se dispara a corta distancia, como habría ocurrido, presumiblemente, en el caso de que se hubiera cometido algún atentado dentro de la casa consistorial.