Un gran complejo sanitario compuesto por cuatro centros especializados y uno de salud, cinco hospitales, varios espacios ciudadanos y una zona verde ocupará los 76.351 metros cuadrados del recinto del antiguo Hospital La Fe de Valencia. Cinco años después del traslado de la mayoría de dependencias a Malilla y tras paralizar el derribo, la Conselleria de Sanidad ya ha hecho público el proyecto que dará uso a parte de las antiguas instalaciones de Campanar.

Con un plazo de dos legislaturas y un presupuesto previsto de 146 millones de euros, la conselleria mantendrá dos edificios y construirá nuevos centros en el espacio sanitario que ha denominado «Campanar-Ernest Lluch», en homenaje al exministro de Sanidad socialista, impulsor de la Ley General de Sanidad y asesinado por ETA en el año 2000.

Los vecinos de la zona volverán a ser atendidos cerca de casa, como reclamaban, pero aquellos del área metropolitana o incluso de otros municipios de la provincia también acudirán a consultas externas y servicios especializados que se instalarán en este espacio.

La prioridad, según explicó ayer la consellera de Sanidad, Carmen Montón, es devolver la atención sanitaria al barrio -que quedó en «abandono», afirmó- pero también se han tenido en cuenta las necesidades futuras en cronicidad, salud mental y neurorehabilitación de la ciudad de Valencia y su provincia.

Según la conselleria, los vecinos de Campanar, Tendetes y Calvari tendrán un «completo» centro de salud, que además de atención primaria contará con servicio de cirugía menor, rehabilitación, odontología, centro de salud sexual y reproductiva, salud mental, diagnóstico precoz de cáncer de mama y servicio de urgencia las 24 horas. Además, habrá un centro con 20 especialidades de consultas externas y cuatro quirófanos para cirugía mayor ambulatoria, siendo el primer centro que lo tiene de forma extrahospitalaria, según Sanidad, por lo que con este complejo quedarán cubiertas la mayoría de visitas habituales al médico.

Y un aparcamiento subterráneo

De las nuevas construcciones, en el área de cronicidad se proyecta el Hospital de Media y Larga Estancia, que atenderá a toda la provincia de Valencia con 150 camas; y un centro de neurorehabilitación ambulatoria integral e infantil para Valencia. Para la atención en salud mental, habrá cuatro hospitales de día, con capacidad para 120 personas en total, que atenderán trastornos de personalidad y conducta alimentaria, entre otros. También se ha planificado un centro de encuentro que ofrecerá acompañamiento a enfermos mentales y a sus familias. Además, habrá un área ciudadana con espacio para asociaciones, mujeres y una escuela de salud, además de una zona verde y un aparcamiento subterráneo.

Según fuentes de la conselleria de Sanidad, el proyecto es ambicioso, porque antes de empezar las obras y decidir qué derribar o mantener «se tiene que definir» y «sí sabemos lo que necesitamos, por eso se ha planteado».

El Consell prevé iniciar las actuaciones en el tercer trimestre de 2017 con la rehabilitación del edificio de la calle Joaquín Ballester, que acogerá temporalmente el servicio de urgencias de la zona. Estas obras tendrán una duración de un año y en principio costarán 765.000 euros.

A principio de 2018 se remodelará de forma integral la antigua instalación de investigación y laboratorios, donde se ubicarán el servicio de emergencias sanitarias, la parada del SAMU y la unidad de detección precoz del cáncer. Las obras finalizarán a mediados de 2019 y el presupuesto es de más de 2,5 millones de euros .

El segundo trimestre de 2018 empezará la construcción del centro de salud con servicio de urgencias y del Centro de especialidades de alta resolución. En la actualidad está abierta la fase de licitación de redacción de proyectos, y Sanidad prevé que el centro de salud se pueda inaugurar en 2019 y el de Especialidades en 2020. Esto sería en la siguiente legislatura y la inversión estimada es de 19,4 millones de euros.

El diseño y distribución del resto de edificios -de las áreas de cronicidad, salud mental, y los espacios ciudadanos- será el resultado de un concurso de ideas que se celebrará en 2017 con un jurado compuesto por miembros de la conselleria, el ayuntamiento de Valencia, asociaciones vecinales, la Universitat Politècnica de València y el Colegio de Arquitectos. Ayer la consellera aseguró que «del abandono y la falta de planificación» se pasará «a un nuevo espacio de salud referente en calidad e innovación sanitaria» que, añadió, «responde a las necesidades sanitarias del barrio y demandas de futuro». Desde Sanidad apuntan que en los presupuestos de 2016 ya hay una partida para las obras y que en las cuentas de la legislatura también está contemplado.

Críticas por falta de previsión

La Federación de Sanidad de CC OO-PV criticó ayer «falta de transparencia» de la Conselleria de Sanidad y la gerente del Departamento de Salud Valencia-La Fe, Mónica Almiñana. El sindicato ha criticado que Sanidad y La Fe «ni siquiera han establecido contacto con la Junta de Personal y con los diferentes sindicatos de la Mesa Sectorial». La organización se queja de que en las previsiones del Consell no está contemplado dónde ubicar el área de esterilización, o el futuro del área de lavandería, que aún permanecen en estos recintos; o qué se va a hacer con el almacén de isótopos radioactivos.