Alrededor de veinte familias de alumnos de Infantil de las pedanías de Poble Nou, Borbotó y Carpesa adeudan desde hace varios meses el recibo del comedor escolar que les gira el colegio público de Benifaraig, y exigen a Conselleria de Educación que intervenga y se haga responsable de un «error provocado» por el CEIP Manuel González Martí.
Según explica María José Chisbert, presidenta de la Associació de Veïns de Borbotó, el pasado año, cuando salió la resolución de ayudas para el transporte y el comedor de Conselleria, los responsables del colegio aseguraron que éstas daban cobertura tanto a alumnos de Infantil, como de educación obligatoria. Sin embargo, en el mes de noviembre comunicaron a los padres de 19 niños de Infantil de estas tres pedanías que se había malinterpretado la resolución de Educación y que el comedor no está incluido. Además, al estar fuera ya de plazo, perdieron toda opción de solicitar la denominada ayuda asistencial.
El Consejo Escolar decidió, según explica Chisbert, condonar las dos primeras cuotas del curso por el error cometido, pero cobrar las siguientes, a razón de 74 euros por alumno. Sin embargo las familias exigieron «responsabilidades» al centro, ya consideran que los niños y sus padres no son responsables de esta situación.
Las familias propusieron entonces al Consejo Escolar que pasara el 50 por ciento de los recibos de los primeros meses para compensar el error competido, pero el máximo organismo del CEIP Manuel González Martí lo rechazó.
De esta manera, los padres, en una asamblea celebrada el pasado 19 de diciembre de 2016 acordaron devolver todos los recibos que adeudaban al colegio en concepto de comedor escolar.
En marzo, y como muestra de la buena voluntad del colegio para resolver este conflicto, el Consejo Escolar realizó una nueva propuesta: fraccionar los pagos por el elevado importe de la deuda acumulada (en febrero era de 374 euros por alumno), pero las familias lo volvieron a rechazar.
Cansadas de la situación, las familias han decidido movilizarse. El pasado 29 de marzo se dirigieron al Síndic de Greuges para detallar lo que consideran una situación de «indefensión total» de los padres. Días más tarde se reunieron con José Vidal, subdirector de Educación para exponerles el problema y le pidieron a Conselleria que asuma las responsabilidades por la negligencia cometida por el centro escolar. Sin embargo, la respuesta que recibieron fue que Conselleria ya tiene todos los recursos comprometidos para este curso y no podían destinar una partida extra al asunto, siempre según indican los padres.
Conselleria lo incluirá en 2018
«Este año se incluyó por primera vez en la convocatoria de ayudas de comedor al alumnado de pedanías como beneficiario directo de las ayudas, pero para las enseñanzas obligatorias, es decir Primaria y Secundaria. Para el año que viene la convocatoria ya incluirá también la etapa de Educación Infantil como beneficiario directo», aseguraron fuentes de Conselleria a este periódico en referencia al problema que están viviendo estas familias. Sin embargo, las familias afectadas exigen que la medida se incluya ya este año.
«Todo situaciones que no se solucionan crean indefensión y desconfianza ante las instituciones. Algo que no debería de pasar pues, la voluntad política parece estar a favor del trabajo favorable a los ciudadanos. Pero el tema está obviado y pasando del problema que nos han creado este curso escolar 2016-2017. Queremos soluciones y esperamos que la máxima autoridad que es la Conselleria nos lo dé», explicaba ayer a este periódico María José Chisbert en representación de las familias afectadas, mayoritariamente de Borbotó.
