Un día después de que la Trobada de Escoles en Valencià tomara la Plaza del Ayuntamiento, Joan Ribó expresaba ayer en voz alta su deseo de que ésta deje de ser «una gran rotonda» e indicaba que el Consistorio está empezando a planificar su remodelación, que se acometerá tras la de las plazas de la Reina y de Brujas. Tras visitar la mesa petitoria contra el Parkinson instalada a la puerta del Ayuntamiento, el alcalde confirmaba que el equipo de Gobierno ya estudia la reordenación de las líneas de los autobuses de la EMT que pasan por este punto.

«No son solo los aspectos urbanísticos, sino también de movilidad», indicaba Ribó, quien confía en que la reurbanización de las plazas de la Reina y de Brujas «dulcifique» el tráfico en el centro de la ciudad. «Ésta - en referencia a la plaza del Ayuntamiento- será la ultima, pero en algún momento ha de ser la plaza de todos, no una rotonda. No sé cuándo, es muy pronto para decirlo. Este mandato se harán las plazas de la Reina y Brujas».

«Estamos empezando a planificar a ocho años en lugar de a cuatro. De momento cerramos la plaza del Ayuntamiento al tráfico algún domingo, puede ser que la cerremos algún otro día. Es bonito verla de niños», incidía Ribó en referencia a les Trobades. «Tienen un simbolismo especial» porque Escola Valenciana «no había tenido muchas facilidades» hasta ahora, enfatizaba.

En la misma línea se expresaba el concejal de movilidad, Giuseppe Grezzi, quien admitía que se trabaja en la posible remodelación de las líneas de la EMT que atraviesan lo que hoy por hoy es el centro neurálgico de la ciudad. En total, el edil hablaba de catorce líneas y cómo hacer posible a través de intercambiadores y lanzaderas evitar llegar a la Plaza del Ayuntamiento. Grezzi llegó a enumerar como puntos de conexión Lluis Vives, Plaza de Tetuan, Torres de Quart, Plaza de España y Angel Guimerá. Algo que a día de hoy aún está muy en barbecho. «Avanzaremos en esa redefinición para que deje de ser una rotonda», señalaba.

En cualquier caso, Grezzi admitió que se trata de una empresa a más largo plazo, que pasa primero por la remodelación de la Plaza de la Reina y la de Brujas. «Tenemos la fea costumbre de cumplir nuestro programa, somos tan radicales que lo cumplimos», ironizaba, para recordar que dos de los puntos del pacto de la Nau fimados tras las elecciones de 2015 se refieren a las mejoras en la EMT y a la parcela de la movilidad, «en su más amplia expresión».