El Ayuntamiento de València le contestó a Carmen Amores el 28 de mayo de 2015, tras sus reiteradas quejas. Sin embargo, en la notificación consta que la obra fue entregada a la Biblioteca Municipal central con las siguientes características: «430 páginas, mide 21 centímetros, presenta la cubierta rasgada y separada del lomo; y tiene la encuadernación muy dañada». «Por todo ello se registró el el libro de registro de la biblioteca (nº 94.422) -el ejemplar que ahora tiene Carmen en su poder es el 94.423- y se catalogó en Absys (programa de gestión bibliotecaria que permite acceder a los fondos de la biblioteca desde internet), pero no se le puso tejuelo ya que dado su estado se decidió guardar en una funda de cartón no ácida a la espera de poder restaurarlo», afirma el expediente. Y añade: «Es poco frecuente devolver un libro que ha sido donado, pero dadas las circunstancias personales y asumiendo esta donación como una 'cesión temporal' al Ayuntamiento de València, se accedió a ello».
Carmen Amores sospecha que el ayuntamiento «ha hecho negocio con mi ejemplar sin pensar que yo iba a reclamarlo. Por eso, cuando lo pedí me devolvieron otro que debían tener ellos y que está hecho un asco. Tiene el mismo título, es del mismo autor.. pero no es mi ejemplar. Al menos no es el ejemplar que yo entregué, que tenía tapas y estaba conservado en muy buen estado. Por eso pensé que tal vez me indicarían un precio o se interesarían en comprarlo. Si había alguna opción... el negocio lo han hecho ellos porque si yo llego a recoger el libro... ni me lo llevo. El problema fue que mi hija no sabía ni qué libro era, así que se llevó lo que le entregaron y ahora llevo años de pelea. Y no pienso parar porque me indigna».
El actual gobierno, al tanto
La respuesta municipal es de 2015. Entonces, no gobernaban los que lo hacen ahora. El servicio de Acción Cultural que dirige María Oliver investiga ahora qué ha podido pasar tras conocer la denuncia de Carmen Amores, de la que no tenían (ni tienen) constancia alguna.
