«El año pasado, por estas fechas, se habían vendido 1.644 entradas. Este año, en el mismo momento, ya son 11.429. Eso demuestra que fue un acierto empezar la campaña de venta en el mes de febrero y que los carteles, con apuestas tanto locales como internacionales, es acertada y atractiva. Y ahora es cuando verdaderamente empieza su promoción». Con estos datos, el concejal de cultura festiva Pere Fuset anunciaba las novedades de los conciertos de la Gran Fira de València, uno de los grandes troncos de un programa festivo que «nuevamente, tendrá múltiples actividades, que iremos desvelando poco a poco y en la que intentaremos superar el éxito del año pasado y que incluirá más música en directo, gratuita y en la calle».

Los conciertos de Viveros tendrán como principal novedad la apertura de una «terraza» con escenario propio, en el que habrá música en directo las horas desde la apertura de puertas al inicio del concierto, así como la instalación de gradas para quien quiera ver los conciertos sentados y la colocación de césped artificial. Asimismo, se introducirán nuevos servicios para atender las necesidades de los asistentes: se ampliará la zona de gastronomía con una mayor variedad de comidas y la inclusión de opciones vegana y vegetariana y más zonas para aparcamiento de bicicletas y espacios para personas con movilidad reducida.