Activistas en defensa de l'Horta realizaron el pasado domingo una acción «artística» para manifestar su rechazo a la propuesta de construcción de un Parque Acuático en los terrenos de la desaparecida partida del Pouet.

La acción consistió en la intervención de dos vallas publicitarias ubicadas al final de la avenida Pío Baroja, la primera con una fotografía de la partida del Pouet el día que se iniciaron los desalojos; la segunda, con la frase «No al parc acuàtic».

Según algunas de las personas participantes en la acción, el uso de las vallas publicitarias pretende evidenciar tanto el modelo de ciudad generado -la ciudad pensada para el transporte individual de vehículos a motor, a través de grandes avenidas, consumismo intenso, etc.-, como la memoria del lugar, los conflictos y las experiencias de vida sobre la que ésta se asienta.

Tal como se desprende de la frase de una de las vallas, esta acción se enmarca dentro de un conjunto de acciones en oposición al proyecto de construcción del parque acuático que la empresa Rain Forest S.A. planea realizar sobre los terrenos de la antigua Partida del Pouet.

Estos terrenos fueron cedidos en el año 2001 por el Ayuntamiento de València a dicha empresa por un periodo de 50 años con el compromiso de dar uso tanto a las tierras como a las alquerías. Actualmente, las alquerías, catalogadas en el Plan General de Ordenación Urbana como Bien de Relevancia Local, se encuentran en un importante proceso de degradación y la empresa en cuestión no ha realizado hasta la fecha ninguna acción de mantenimiento ni conservación.

El Ayuntamiento facilitó el proceso mediante la aprobación del PAI y la expropiación de las personas del Pouet, tras un período de fuerte degradación de la zona y acoso inmobiliario. Por último, consideran que «la reapropiación del espacio público puede servir para la reflexión colectiva sobre el modelo de ciudad y sobre las posibilidades de la huerta como espacio productivo más allá de la tematización de la misma».