Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Marina

El Consorcio licitará la gestión conjunta del varadero y los amarres de la marina

Seis empresas se interesan por las dos pastillas de uso industrial (85.000 m2) - El club náutico insiste en volver a la dársena

El Consorcio licitará la gestión conjunta del varadero y los amarres de la marina

El Consorcio Valencia 2007 ultima los pliegos de condiciones para licitar la gestión conjunta de los amarres y el futuro varadero industrial, la que será, se espera, una de las concesiones más lucrativas del recinto, lastrado por una deuda millonaria y cuya viabilidad estudian ahora las administraciones estatal, autonómica y local.

Aún no está cerrado pero «la previsión es que la gestión sea conjunta y se adjudique a una sola empresa», apuntaron fuentes del órgano gestor de la marina. El consorcio asegura que hay seis empresas que se han interesado por gestionar ambos espacios.

El varadero es un complemento indispensable para cualquier puerto deportivo. El Club Náutico de València lo sabe y cuenta con uno propio, aunque de gestión externa, si bien su superficie es muy inferior a la del que habrá en la marina. Las dos parcelas de uso industrial reservadas por el planeamiento de la marina suman 80.000 m2(30.200 y 55.000 m2).

No todo serán espacios para la reparación de yates y megayates también se ha proyectado en esta zona una polideportivo náutico. Con todo, el futuro varadero tendrá cuatro veces las dimensiones del varadero del Club Náutico de València.

El suelo industrial de la marina no suscita solo interés de las empresas náuticas. Se trata de un suelo de gran valor añadido para las nuevas industrias, como la impresión 3D, al que se espera sacar el máximo rendimiento tendiendo en cuenta la escasa oferta de este tipo de enclaves industriales de calidad en la ciudad.

Los pliegos de condiciones de la concesión del varadero y los amarres valorarán, entre otras cosas, el diseño arquitectónico de los edificios (de baja volumetría) previstos en las parcelas de uso industrial, así como la redistribución de los amarres y la ocupación de lámina de agua y otros factores. La idea es duplicar el número de amarres (ahora hay 800), la principal fuente de ingresos del Consorcio. El presupuesto de licitación no ha transcendido, aunque solo para los amarres se barajaron 25 millones de euros.

Al contrato no optará el CNV, cuyo presidente, Julián Vicó, aseguró ayer que mantienen la idea de volver a la marina, en concreto a la dársena, el emplazamiento original del club, desde donde se trasladó hace décadas a Pinedo. La concesión del Puerto de València al Náutico acaba en 2030. «La marina es la ubicación natural para el club»

Compartir el artículo

stats