Era cuestión de tiempo que llegaran a las playas de València y el primero en sufrir sus temidas picaduras ha sido un niño de once años. Un ejemplar de carabela portuguesa picó ayer por la tarde a un menor que se estaba bañando en la playa de la Malva-rosa. En torno a la misma hora otro ejemplar de este peligroso hidrozoo sifonóforo era encontrado en la orilla con apenas un tentáculo, como el que aparece en la fotografía.
La Policía Local de València retiró el cuerpo sin vida de este tipo de medusa y los padres del menor atacado por el animal lo trasladaron al Hospital Clínico de València, donde fue atendido de la picadura. Ante este hecho, es probable es que las autoridades valencianas opten por cerrar durante la mañana de hoy la playa de la Malva-rosa y realizar una inspección para ver si encuentran algún rastro de este peligroso animal que pone en jaque el baño en verano.
Esta mañana, sin embargo, la playa había regresado a la normalidad y fuentes de la Policía Local de València han señalado a este periódico que, de momento, no habían recibido ningún aviso por la presencia de medusas ni se había registrado ninguna incidencia al respecto.
Este hallazgo de carabelas portuguesas en València se suma a otros casos similares registrados en el litoral valenciano. Así, Dénia mantuvo cerrada la playa de les Deveses después de que los socorristas de la Cruz Roja encontraran y sacaran a tierra lo que se pensaba que era una medusa carabela portuguesa.
Durante la tarde y la mañana estuvieron peinando el litoral por tierra y con una embarcación y ya no encontraron más de estos peligrosos hidrozoos. No obstante, como medida de precaución, se decidió cerrar la playa.
También, en Tavernes de la Valldigna se vieron obligados a cerrar su playa ante la aparición de dos ejemplares de carabela portuguesa en el agua. Según confirmaron fuentes municipales, uno de los hidrozoos sí que pudo ser sacada pero la otra, aunque fue avistada, no pudo ser localizada.
Era la tercera carabela que aparecía en Tavernes de la Valldigna en una semana, después de que hace unos días se sacara del agua otra que se encontraba varada y que fue retirada por los socorristas de la empresa Vadepsa, que gestiona el servicio en este litoral.
La Guardia Civil alerta ante posibles picaduras de medusas y da una serie de consejos. Entre ellos nada de agua dulce, no rascarse la herida y mucho menos aplicarse amoniaco. Lo mejor, el agua salada del mar para combatir el dolor.
