Votar en sentido afirmativo de forma abrumadora y festejarlo no basta para sacar adelante una versión tan extraña de las Fallas como la que se avecina en el mes de septiembre. Por eso, una vez apagados los rescoldos de la asamblea empieza una labor organizativa de primer orden. La más importante es la «operación Canal de Suez»; es decir, cómo sacar las piezas de Feria València y combinarlo con las de los talleres, donde se acumulan fallas de 2021, hogueras de «no se sabe cuando» (Alicante aún no ha decidido si plantará o no este año), fallas de poblaciones y fallas de 2022.

La premisa fundamental es trabajar prácticamente las 24 horas: incluyendo tarde, noche y madrugada. Porque hay un pánico especialmente a los atascos en Feria València, que llevarían a un encarecimiento de los costes de vehículos y conductores al aumentar el número de horas. La previsión del Gremio es empezar a sacar piezas sobre el 15 de agosto. A esto habría que añadir que la Sección Especial, que no tienen fallas en la Feria, sacaría también por su cuenta.

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Descubre fallas con nombre y apellido guardadas en Feria València Reportaje Gráfico: Fernando Bustamante

Pero los flecos son muchos. Incluyendo, por ejemplo, la vigilancia de las piezas, que durará más días de lo habitual. O la posibilidad de almacenar material en los casales (que no tendrán prácticamente actividad hasta el inicio de la «plantà») o el ya apuntado problema de determinar la responsabilidad de los riesgos si hay remates que, por el deterioro, no encajan. Así como el conflicto que pueden suponer aquellas comisiones que decidan no plantar. En ese sentido, la federación de Gremios recordó que, una vez autorizado por Sanidad, los contratos vuelven a estar en vigor y que, por ello, fallas y hogueras deben plantarse. En caso contrario, habría que renegociar los costes de almacenamiento o decidir el destino de las obras.

Promesas con los permisos

Y además de los artistas, están las comisiones. Ayer, el concejal Carlos Galiana se comprometió a acelerar «la resolución de los permisos» y mientras «el mundo fallero ha de continuar demostrando su comportamiento exquisito de la pandemia. Nos quedan meses apasionantes por delante para tomar las decisiones de forma colectiva». También el alcalde Joan Ribó señaló como prioridad que se levante la mano a los casales, para tenerlos operativos de cara a los meses que se avecinan.