La Fuente del Negrito, situada en el barrio del Carmen, acumula suciedad ocultando el color oscuro característico que da nombre a la fuente y la plaza en la que se encuentra ubicado. Así, lo ha denunciado la concejala del Grupo Municipal Popular, Julia Climent,quien ha señalado que «la falta de mantenimiento brilla igualmente por su ausencia en todo el entorno». Así, ha señalado que no se ha repuesto la verja artística que rodeaba la fuente ni uno de los naranjos amargos que dan sombra a la plaza, gran parte de los ladrillos perforados que delimitan el perímetro de este conjunto se han desprendido y por todo el suelo abundan las ramas, los plásticos y las colillas.

Climent ha destacado que «esta es una muestra más de la desidia a la que, por desgracia, nos tiene acostumbrados el gobierno municipal en la conservación del patrimonio histórico de nuestra ciudad». Por ello, la edil popular ha instado al equipo de gobierno a intervenir de inmediato para subsanar todas las deficiencias que presenta la Fuente del Negrito y, más específicamente, a limpiar la figura central, a fin de recuperar su color original, así como a mejorar, cuanto antes, el mantenimiento de la jardinería del entorno. «El gobierno municipal no puede seguir instalado un minuto más en la parsimonia más absoluta mientras el patrimonio escultórico de la ciudad se deteriora a marchas forzadas», ha manifestado Climent.

La edil ha recordado que la fuente se encuentra en uno de los puntos más concurridos del barrio del Carmen y en un eje turístico fundamental como es la calle Calatrava, que une la Lonja con el Palau de la Generalitat.

Esta fue construida en 1850 y se trata de la primera fuente pública de agua potable de la ciudad. Recibe su nombre del niño desnudo que la preside, el cual sujeta una gran concha con surtidores de agua.

La figura del niño fue sustituida tras la Guerra Civil y, en concreto, en 1955, fue la pieza actual obra de Luis Roig d’Alós.