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La casa de la calle Palma, 5 y los Bautistas

Su historia está vinculada directamente al trabajo en nuestra ciudad de misioneros suecos de la Iglesia Bautista

Portón del edificio de la Calle Palma, 5 desde la Calle Fenollosa. Verum Valentia | FOTO DE VALENCIA EVANGÉLICA

En varias ocasiones, hemos comentado cómo elegimos los temas a desarrollar. En esta ocasión todo empieza con una fotografía, la de la fachada de un edificio muy particular y singular en pleno barrio del Carmen.

Es cautivadora e hipnótica la imagen que ofrece cuando caminamos desde la Plaza del Árbol por la Calle Fenollosa, se trata del edificio con el nº 5 de la Calle Palma. La foto está tomada desde esa calle perpendicular que desemboca en su puerta de entrada; al ampliarla vimos el detalle que cautivó nuestra atención, sobre el arco de esa puerta se adivinaban unas letras difuminadas, casi inapreciables por el paso del tiempo. Notarias de que en ese lugar, en otro tiempo, hubo una iglesia cristiana; el matiz es que se trataba de una Iglesia Evangélica Bautista. A la atracción que ya sentíamos por el edificio, se unió el desconocimiento de ese lugar como iglesia de culto protestante en esos primeros años del siglo XX, determinante para que despertara nuestro interés e inquietud.

La casa de la calle Palma, 5 y los Bautistas |

En Valencia, las primeras apariciones de grupos protestantes datan del siglo XVI, resultantes del movimiento iniciado en Alemania de Reforma del Catolicismo. La repercusión fue escasa, las nuevas ideas de Reforma Protestante tuvieron poca difusión y pocos fueron sus seguidores. Eran grupos muy reducidos carentes de proselitismo y en total anonimato dada la intimidación que ocasionaba la Inquisición. Uno de ellos, tal vez el grupo más importante, fue el encabezado por Pascual Centelles, perteneciente a una de las dos sagas familiares mas importantes de la Ciudad en contraposición a la de los Borgia, en dura lucha por el poder nobiliario de la ciudad. Formaron parte de este grupo: Jerónimo Conques y Segismundo Arqués, en él fluían desde influencias del espiritualismo italiano y protestantismo helvético a ideales reformistas de Erasmo de Rotterdam. El Grupo fue denunciado a la Inquisición y desapareció totalmente en 1571.

La casa de la calle Palma, 5 y los Bautistas |

Debemos esperar casi tres siglos a otros movimientos Protestantes notorios. El levantamiento en Septiembre de 1868 contra la monarquía de Isabel II, sirvió como señal de inicio para la entrada de nuevas formas de Cristianismo, al ser decretada la tolerancia de culto por el gobierno provisional.

La casa de la calle Palma, 5 y los Bautistas | FOTOS DE VALENCIA EVANGÉLICA

La Iglesia Bautista llega a Valencia años mas tarde, en 1885, de la mano del misionero sueco Carlos Augusto Haglund, tras pasar 3 años de aprendizaje del idioma en Barcelona junto a su maestro y mentor Eric Anderson Lund.

Cuando llega Haglund, dedica su labor evangélica a los marineros escandinavos que llegan a València, por lo que se hospeda en una pensión del puerto. El 5 de Noviembre de 1885 envía al alcalde de Pueblo Nuevo del Mar un escrito informándole de la apertura de un Lugar de culto en la Calle del Ángel, 6 (actual calle de José Benlliure). Al principio, solo fue para los marineros y a partir de Febrero del siguiente año, para todos los valencianos. Los primeros bautismos se realizaron el 15 de Agosto de 1888, siendo Luis Vidal, Pedro Navarro y Luis Segarra los que pasarían a la historia de los Bautistas valencianos, por este hecho. El día 2 de septiembre se realiza el primer Culto de Santa Cena, constituyéndose la primera Congregación de Discípulos.

Dado que la mayoría de sus miembros viven en València, trasladan los cultos a la ciudad, instalando la primera Capilla en la Plaza de Mosen Sorell, 5, más tarde en la Calle Zapateros, 7 y en la Calle Mendoza, 4 y 6, todas ellas entre septiembre y diciembre de 1888. El 24 de marzo de 1889 se trasladan a la Calle Portal de Valldigna, donde permanecen alrededor de 6 años y es en ella donde se eligen los primeros diáconos; Luis Vidal y Vicente Mateu.

Primeras controversias

Una de las iniciativas de Haglund que más controversia suscitó, ocurrió en la Navidades de 1893. Abrió una caseta en la feria dedicada a la venta de biblias; la prensa de la época se hizo eco y la división de opiniones fue manifiesta, causando desde admiración hasta burlas.

El 4 de Febrero de 1895 fallece Carlos Haglund, siendo inhumado en el cementerio civil de nuestra ciudad. Tan solo siete meses mas tarde le releva Juan Uhr Kos, también sueco, tomando el cargo de pastor el día 6 de octubre en una nueva capilla en la Calle del Pilar, 45. Durante trece años continuaron las constantes itinerancias, pasando por otras tantas capillas en las Calles Roteros, Arzobispo Mayoral y Encarnación.

El sueño de los Bautistas de Valencia de tener una iglesia en un local propio, se hace realidad el 3 de Abril de 1908 cuando Juan Uhr compra a José Val Carnicer una casa en la Calle Palma, nº 5.

Compra por 16.000 pesetas

Según consta en el documento de compra-venta realizado en esa fecha ante el notario Antonio Gómez Barberá, la compra se realiza por un valor de 16.000 pesetas, pagando en ese acto 15.000 pesetas en efectivo que junto con las 1.000 entregadas como reserva, cubrían el montante total. En relación a la obtención del dinero para la compra, nos dice Jesús Millán en su libro «Valencia Evangélica, 125 años de testimonio» que el anhelo de tener un local propio se inicia en 1890 con el misionero Haglund y la recogida de fondos para tal fin. En el primer año se recogieron 155 pesetas, así que el impulso final de fondos vino desde fuera de España. Según la escritura, la casa contaba con un patio, cuarto bajo, entresuelo, piso principal, porche, terrado y huerto, éste último con una zona cubierta de 108 metros cuadrados y otra descubierta de 196 metros cuadrados.

Recién comprada la casa, tuvo que sufrir el retranqueo de su fachada según ordenanza municipal, para alinearse con el resto de las casas de la Calle. Para su realización se contrató al arquitecto Francisco Mora Berenguer, para realizar una fachada notable y acorde con la importancia que iba adquiriendo la Comunidad Bautista. El proyecto fue presentado en el ayuntamiento el 29 de Mayo de 1908, con memoria y plano de esa nueva fachada. El retranqueo supuso la cesión para vía pública de 7,59 metros cuadrados. Se aprovechó la obra para realizar otras menores en el interior de la vivienda: como levantar algunos tabiques, acondicionar cocinas y retretes, cambiar algunas baldosas del pavimento, abrir una puerta interior y levantar un muro de medio metro. El proyecto fue aprobado por el ayuntamiento el 1 de Junio de 1908 previo pago de las tasas municipales de 49 pesetas. Las obras duraron cerca de 3 meses y el resultado fue una fachada de línea plana de cuatro cuerpos con asimetría, quedando la puerta de entrada y el balcón principal desplazados a la derecha a fin de hacerlos coincidir de forma perpendicular con la Calle Fenollosa; la fachada organizada en 4 alturas: una planta baja dividida, con entresuelo, planta principal y altillo con 7 ventanas corridas de arco deprimido y parteluz. Rematando la cornisa una cenefa en piedra de losas superpuestas en forma de gradas escalonadas en zig-zag.

El portal, una de las protagonistas del edificio, adintelado y remarcado por un arco mixtilíneo de 3 arquivoltas pétreas de cantería, siendo la mas cercana a la puerta la decorada con una cenefa floral esgrafiada y amplias impostas en todas ellas. La puerta de 2 hojas en madera tachonadas y guardaejes rebajados en la piedra, con el tamaño perfecto para la entrada de carruajes. A ambos lados del portal 3 ventanas de arcos eclécticos divididos, abarcando 2 plantas; la superior con balcón plano de cerrajería, llegando a la misma altura que la puerta. En el piso principal y sobre la puerta nos encontramos al otro protagonista del edificio, un ventanal triforado con tracería y balcón de rosetones cuadrilobulados insertados; los 3 ventanales restantes, divididos en cuatro asimétricamente y orlados con arquivoltas a media altura.

Fachada modernista

Francisco Mora realizó una fachada modernista de influencia europea con una interpretación personal del Gótico Valenciano, algo que repetiría unos meses mas tarde en el Palacio Municipal de la Exposición Regional Valenciana de 1909, máximo ejemplo de lo que se denominó Modernismo Valenciano.

El 4 de Octubre de 1908 se realizó la inauguración. La capilla fue colocada en el entresuelo, sus grandes ventanales permitían la entrada de luz natural durante muchas horas; en el piso superior quedaban las viviendas, una de ellas habitada por Juan Uhr y su familia; la planta baja fue ocupada por el colegio que 8 años antes constituyó Feliciana Armengol, viuda del Pastor Haglund, junto a sus dos hijas en el edificio de la Calle Roteros. El patio sirvió como lugar de recreo de los alumnos asistentes al colegio.

El baptisterio que se colocó en la capilla venía de la que tuvieron en la Calle del Ángel, fue realizado por el carpintero Luis Vidal, en madera y forrado de chapa metálica.

La rotulación como Iglesia Evangélica sobre la puerta debió esperar hasta 1910, puesto que la legislación vigente no permitía la identificación de los Templos. Se realizó con letras en relieve que fueron objeto de sabotaje por parte de radicales en no pocas ocasiones.

Hasta aquí nuestro recuerdo a ese edificio casi invisible y la historia que llevó a su construcción. La historia de unos misioneros con espíritu evangelizador que permitió que, mientas en España el Movimiento Protestante de la Iglesia Española Reformada Episcopal fuera el más importante, en València predominara la Iglesia Bautista. La labor de los misioneros suecos Eric Anderson Lund, inspirador de la estrategia misionera; Carlos A.Haglund, el misionero por excelencia, y Juan Uhr, continuista y consolidador de la obra misionera, fue determinante para que así fuera…

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