"Superviernes" de circos en València

La plaza de Toros vuelve a albergar funciones 11 años después

Los circos inauguran sus carpas en el «superviernes» del día 1 | FOTOS DE GERMÁN CABALLERO

Los circos inauguran sus carpas en el «superviernes» del día 1 | FOTOS DE GERMÁN CABALLERO / moisés domínguez. valència

Moisés Domínguez

Moisés Domínguez

La Navidad parece haberse puesto de acuerdo en la ciudad de València para, más allá de los primeros pasos dados el pasado fin de semana, implosionar definitivamente el 1 de diciembre. A la vez que se inauguran las luces oficiales de la ciudad, también los circos abrirán sus puertas para las primeras funciones en su práctica totalidad. Cinco espectáculos de carpa conforman un menú que promete unas horas de evasión.

La temporada de circo no es la escolar porque no saldría rentable y las tardes y, sobre todo, los fines de semana -donde los carteles de «sesiones agotadas» empiezan ya a proliferar- , son necesarios para que los cada vez más caros y exigentes sistemas de montaje y acondicionamiento den para comer a toda la troupe. De los cinco circos, Raluy continuará hasta el 4 de febrero; Alaska, hasta el 14 y Wonderland hasta el 28. El Wow es más limitado de fechas: de 14 de diciembre a 7 de enero.

Los circos inauguran sus carpas en el «superviernes» del día 1

Los circos inauguran sus carpas en el «superviernes» del día 1 / moisés domínguez. valència

Elefantes, osos, felinos, focas y demás fauna pasó a la historia y tan sólo el Circ de Nadal mantiene o quiere mantener un pulso en el que no parece que vaya a llevar las de ganar. Tanto es así, que es el único, a día de hoy, que no ha activado las entradas on line, aunque sí que anuncia actuaciones como las de Coco El Musical, Tributo a Colombia o La banda de Ary Tikki. Sin animales, el repertorio no olvida los clásicos de riesgo, acrobacia y risa, tratando de incorporar versiones 2.0. Evolucionado es el espectáculo del Circo Raluy Legacy, que se distingue de los demás por ese aire a la vez vintage, de las carretas que adornan los alrededores de La Marina. Parafraseando el lema de los Estados Unidos, «In Art We Trust», confiar en el arte supone presentar un repertorio totalmente nuevo «que nos sale del corazón y que es honesto». Un espectáculo en el que «cada actuación es una obra de arte por sí sola», en el que prometen vestuarios exclusivos y extravagantes, clásicos como «el trapecio volante» y, como no podría ser de otro modo, «artistas llevando el cuerpo al límite y jugándose la vida delante de nuestros ojos». Los Raluy pondrán ya en la pista a una nueva generación, los jóvenes Benicio y Charmelle que, con 13 y 14 años estrenarán su número de trapecio. Raluy Legacy siempre viene en Navidad, aunque en el recuerdo esté el fallecimiento, precisamente aquí, hace dos años, en plena Navidad, del patriarca Luis Raluy, cuyo legado («Legacy») continúa ahora la familia y el elenco de artistas.

El Circo Wow celebra que, con la llegada del «único circo de origen valenciano y nutriéndose de artistas y talento local», también se reabre para la causa circense el circo del centro de la ciudad: la plaza de toros. Donde hace dos generaciones pasaron las panteras del circo de París, el hombre obús del Circo Price, los equilibristas del Niagara y los Beatles de Cádiz del Monumental, la fantasía circense del Puente sobre el Rio Kwai del Americano o a Gabi, Miliki, Fofito y Milikito. Además de los clásicos del repertorio del momento se incorpora el concepto de las Noches de Circo, donde el «Wow» se convierte en «Xow» para ver en acción a Rafa Alarcón, Mireia Ortiz, Toni Pons, Oscar Tramoyeres, Impro 3 o Grison Beatbox

El Wonderland se sabe el camino y mientras frente al Bioparc haya una explanada baldía, allí instalarán su espectacular carpa. También se apuntan al concepto «2.0» para definir la parte más pastelona del espectáculo, que es la relacionada con los cuentos infantiles versioneados. Y los clásicos, con su rueda de la muerte incluida y atracciones procedentes de todo el Cono Sur.

Después de enumerar de forma solemne las atracciones, no había otro anuncio en un circo que el de «¡Potente calefacción!». Que ya no se dice porque se la supone. Y aunque el circo se llame Alaska, la temperatura adecuada está asegurada. Vuelven a su espacio clásico de la explanada frente al Cementerio General -con lo que el aparcamiento en la dársena viene que ni pintado- y anuncian la adaptación circense del musical Aladín.

Es la propuesta adicional, en La Plazeta, donde Onirika presentará sus actuaciones, centradas sobre todo en la acrobacia, al participar los gimnastas de Dinamic y que completa la oferta del espacio junto al patio de Salesianos, con pista de hielo y atracciones.