València alcanza el 80% de ocupación hotelera y se lanza a por el mercado norteamericano

La capital del Turia alcanzó 5,59 millones de pernoctaciones en 2023, con un 63,5 % de demanda internacional

El ayuntamiento trabaja en moderar el precio de hoteles de cuatro y cinco estrellas para atraer al "turista de calidad"

Un grupo de turistas visita el centro de València en biciletas de alquiler

Un grupo de turistas visita el centro de València en biciletas de alquiler / Francisco Calabuig

Claudio Moreno

Claudio Moreno

La concejala de Turismo del Ayuntamiento de València, Paula Llobet, y el nuevo gerente de Visit Valencia, Tono Franco, han presentado en Las Naves los datos turísticos de 2023, de absoluta normalidad tras el frenazo pandémico y que posicionan a la ciudad como uno de los enclaves del Mediterráneo más elegidos por los visitantes extranjeros, especialmente de Estados Unidos, Alemania, Francia o Italia.  

Al detalle, la responsable de Turismo ha explicado que el 63,5% de la demanda turística internacional, con una mayor desestacionalización a tenor de los dobles dígitos de pernoctaciones alcanzados en meses como enero, febrero o noviembre. En total, València alcanzó 5,59 millones de pernoctaciones en 2023, lo cual supone un crecimiento del 1,4% respecto al ejercicio anterior. Además, la ocupación hotelera media se situó en un 79,5% –un incremento de 4,4 puntos–, dato superior a ciudades como Sevilla, Granada o Benidorm. 

En cuanto a las llegadas aéreas, en el aeropuerto de València aterrizaron 4,99 millones de personas, con un notable aumento del 22 % respecto al año anterior. Pero lejos de alcanzar su tope, la tendencia no frena, y en enero ya se han registrado 300.000 llegadas por la vía aérea. Y también fue considerable la visita de cruceristas, con un total de 786.500 en todo el año, lo que supone un subidón del 26 %. Al respecto, los responsables de la política turística dijeron: "No estamos en contra de los cruceros, tenemos que intentar ser puerto base y que haya una rentabilidad con más impacto de los crucerista, pero para ello necesitamos ordenar y planificar".

Con estos datos sobre la mesa, ha dicho la concejala popular, es momento de «gestionar el éxito», y para ello ha sacado a licitación un Plan Estratégico de Turismo 2024-2028. Su hoja de ruta tendrá diferentes ejes, entre los que destacan: la gobernanza participativa con agentes del sector y la ciudadanía en general, la medición del impacto turístico a través de 100 sensores que generarán mapas de calor, y la descentralización de los puntos de interés para llevar más visitantes a los barrios, algo en lo que se insistió durante la presentación. 

Objetivo: el "turista de calidad"

Por su parte, Franco ha hecho hincapié en la importancia de crecer de manera sostenible, algo que implica, entre otras cosas, «priorizar mercados con menor impacto negativo sobre el desarrollo de la ciudad». En concreto, el gerente de Visit València ha puesto todo el énfasis en el mercado norteamericano, «muy ansiado por nosotros», por lo que se dedicarán «más recursos a captar su interés». Y ha añadido: «El turista de calidad no es el que se gasta más dinero; sino el que se gasta dinero pero también tiene un comportamiento sostenible y comprometido, aquel que respeta el lugar al que llega». 

Perfilado su visitante objetivo el ayuntamiento ya ha empezado a trabajar para tender puentes. Por un lado, los responsables de la estrategia turística valenciana se han reunido con Delta Air Lines y United Airlines para conectar València con Estados Unidos. Según se explicó, en verano de 2024 la capital del Turia ya tendrá conexión con 102 aeropuertos y 28 mercados distintos. 

Balance del año turístico y presentación de la nueva hoja de ruta

Balance del año turístico y presentación de la nueva hoja de ruta / L-EMV

Por otro lado, el consistorio ha concedido seis licencias hoteleras y trabaja en desbloquear más de 70 licencias de obra de alojamientos turísticos para recibir al turista denominado «de calidad». «València ya parte de un ratio hotelero por debajo de otros destinos competidores, para ese tipo de turistas que queremos captar necesitamos una mayor oferta que regule los precios de hoteles de cuatro y cinco estrellas», subrayó Llobet. 

Desconcentración con rutas en los barrios

Una de las claves de la nueva política turística de València pasa por la descentralización. Potenciar el turismo en todos los barrios, poner en valor su patrimonio cultura e histórico a través de rutas turísticas que se diseñarán con la colaboración de los vecinos. «Vamos a promocionar todos esos atributos que tienen nuestros barrios y que los hacen únicos, ligados al patrimonio pero también a su gastronomía», ha señalado Llobet en la presentación realizada junto con Visit València. 

Sin embargo, ocurre que el turismo concebido como oportunidad laboral y de inversión tiene una contraparte que preocupa en estos mismos barrios. El atractivo turístico también significa proliferación de hoteles y apartamentos, subida generalizada de precios en la vivienda, tanto de alquiler como de venta, pérdida del comercio tradicional y expulsión de residentes históricos. El fenómeno se conoce como turistificación y en la Saïdia preparan una gran manifestación este sábado contra ello.

Preguntada por esta preocupación, Llobet explicó que el consistorio no se pondrá de perfil en el tema de los apartamentos turísticos —«como se ha hecho en los últimos ocho años con un gobierno cuya única medida fue tumbada por los tribunales»—, y recordó que para trabajar en esta cuestión se ha creado una comisión conjunta con el concejal de Urbanismo y el titular de Grandes Proyectos.