El Castellón afronta un partido clave mientras el presidente ultima la compraventa: da igual cuando leas esto. El conjunto albinegro juega esta mañana en Almoradí, en horario novedoso (11.30), contra uno de los equipos a priori más asequibles del grupo. Si el Castellón encara las últimas cuatro jornadas en plena pelea por disputar la promoción de ascenso, el Almoradí apura sus limitadas opciones de evitar el descenso.

Los albinegros llegan a la cita tras una «semana convulsa», en palabras del entrenador Manu Calleja. Hay futbolistas que acumulan cinco meses de impagos. Varios de ellos mostraron su malestar tras la victoria sobre el Borriol de la pasada jornada, pero finalmente se han aplazado nuevas acciones de protesta. La lesión del capitán Guille Vázquez, que sufrió un percance en la rodilla durante el último entrenamiento, coronó una nueva semana de marejada.

El entrenador Manu Calleja no realizará grandes cambios del equipo que goleó al Borriol en Castalia. Vuelve Clyde Essomba, una vez cumplida su sanción, y su inclusión en el once puede ser sustancial, en cuanto a lo que condiciona el juego del equipo. En caso de entrar en el once, saldría algún hombre de ataque, con el tocado Lolo Ivars como principal candidato. Por decisión técnica quedan fuera de la lista hombres como Rubén Fonte o Álex López.

Como novedad, el equipo viajó ayer en autobús a tierras alicantinas, y jugará hoy tras pernoctar en un hotel.

Bajas en el rival

El partido es prácticamente la última oportunidad de redención para el Almoradí, que pagó cara su derrota en Ontinyent la pasada semana. Llegó con empate al descuento, pero se le escapó el punto con un polémico gol que conllevó además las expulsiones de los futbolistas Burguillos, Ouattara y Fran Ortiz, y del entrenador Joserra López.