Josep Domingo, Castelló

La conselleria de Territorio niega que se hayan producido ataques de buitres a ganado vivo en el interior de Castelló. «No se trata de ataques si no que, como han constatado los primeros análisis veterinarios, los animales ya estaban muertos cuando se acercaron las aves». Para rebatirlo los ganaderos han aportado fotografías del «ataque» que según ellos tuvo lugar el pasado lunes en Morella. Las fotografías fueron tomadas por unos turistas desde la carretera entre Torremiró y Herbeset. Además también grabaron la secuencia del ataque, aunque por el momento estas imágenes no se han dado a conocer. En las fotografías se aprecia que las aves carroñeras están encima de la vaca parturienta. En las mismas la vaca todavía está viva, mientras que el ternero recién nacido se ve ya muerto. Los ganaderos aseguran que estas situaciones se han repetido en múltiples ocasiones en los sucesivos ataques denunciados.

Mientras Territorio apunta en su nota que «cabe recordar que los buitres son aves necrófagas y que se alimentan de animales muertos y que muchas reses parturientas mueren durante el parto, cuando se producen los acercamientos de buitres. De hecho, durante 2006 los ganaderos denunciaron 8 casos de ataques a ganado por parte de buitres, y las necropsias constataron que sólo 2 de esos casos se trataron de ataques a animales vivos. Puede suceder de manera extraordinaria que los buitres ataquen excepcionalmente a una res parturienta cuando queda fuera parte de la placenta». Contra esta argumentación los ganaderos aseguran que «el perito que viene a examinar las reses defiende los intereses de la conselleria. Siempre dice que no ha habido ataques, pese a tesis de otros veterinarios que dicen lo contrario». Además los ganaderos inciden en que «no sirve de mucho denunciar los casos porque siempre nos niegan la razón». Según Territorio «en los dos casos que han sido tramitados por responsabilidad patrimonial administrativa y resueltos, por lo que los ganaderos serán indemnizados». Veterinarios consultados por este periódico aseguran que «se producen ataques a ganado vivo, incluso a ganado con varios días de vida. De hecho hay terneros que han sido picoteados cuando estaban vivos, hemos intentado recuperarlos pero ha sido imposible porque tenían demasiadas lesiones». Sin embargo, Territorio insiste en que «en lo que llevamos de año no se ha producido ningún ataque a animales vivos, y los casos de las últimas semanas se trata también de animales muertos por causas naturales, según los primeros análisis veterinarios realizados, a falta de la necropsia oficial». Los ganaderos de la zona de Torremiró y Herbeset, en Morella, aseguran que según sus cálculos ya han fallecido 11 terneros y 6 vacas atacadas por buitres.

El único punto en el que coincide la información de Territorio con la de los ganaderos es en que la conselleria «ha incrementado hasta 800 kg semanales la carne que suministra en los comederos de la zona desde que se cerraron los muladares en Teruel por la entrada en vigor de una normativa sanitaria en Aragón». En este sentido los ganaderos denuncian «la falta de coordinación entre las administraciones, ya que mientras en Teruel cierran los muladares aquí les dan más comida a los buitres, no hay quien se aclare». Cabe recordar que el consejo agrario de Vilafranca se ha opuesto a la construcción de un nuevo muladar en su término municipal. El muladar en cuestión se debía ejecutar con cargo a las «compensaciones» de los parques eólicos. Los veterinarios aseguran que «los buitres prefieren la carne fresca que la carne podrida que se aporta en los muladares». Además, los ganaderos insisten en que «los buitres van a buscar al ganado, de hecho, antes no iban a zonas boscosas, y ahora se introducen en el el pinar hasta llegar a la vaca parturienta». Incluso llegan a manifestar que «los buitres siguen a vacas que están de pie y pariendo y empiezan a vaciarlas, les atosigan y hay veces que la vaca cae por una pared abajo». Los ganaderos insisten en que la pérdida de un ternero les supone más de 500 euros y una vaca más de 1.500 sin que se les compense por estas pérdidas.