El secretario de Medio Ambiente y Desarrollo Rural del PSOE, Hugo Morán, y algunos activistas españoles de Greenpeace se unen esta semana a la expedición que esta organización ecologista está realizando en el Ártico para investigar los efectos del cambio climático en esta zona del planeta.

Durante la segunda quincena de agosto, dos equipos de científicos conocerán a bordo del barco rompehielos de Greenpeace, "Arctic Sunrise", los impactos del cambio climático durante su navegación por el fiordo de Sermilik, en Groenlandia, ha informado esta organización a través de un comunicado.

Además de los miembros de la comunidad científica, acompaña a la delegación española Hugo Morán para comprobar 'in situ' las consecuencias de las políticas que se están llevando a cabo en materia energética y de medio ambiente, han señalado fuentes de Greenpeace.

"Los impactos del cambio climático van a una velocidad de vértigo", ha declarado la responsable de la campaña de Cambio climático y Energía de Greenpeace, Raquel Montón, por lo que ha instado a los gobiernos del mundo "a acordar reducir las emisiones de CO2 que lo provocan a la misma velocidad".

En este sentido, Greenpeace ha solicitado al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que acuda personalmente a la cumbre sobre Cambio Climático en Copenhague y apoye un acuerdo que contemple para 2020 reducciones del 40 por ciento en las emisiones de gases de efecto invernadero de los países desarrollados, respecto a 1990.

Esta organización ecologista ha pedido también al Gobierno español que ayude a que en Copenhague se apruebe una financiación dirigida a los países en desarrollo de 110.000 millones de euros anuales para combatir el cambio climático y detener la deforestación en el Amazonas, el Congo e Indonesia para 2015.

Desde que la expedición al Ártico comenzó el pasado mes de junio, los científicos han advertido del posible colapso del glaciar Petermann, uno de los más grandes del mundo, que podría fragmentarse debido a las elevadas temperaturas.

Según la organización ecologista, esto dejaría a la deriva una superficie helada equivalente a la isla de Manhattan.

Greenpeace ha recordado que una subida de la temperatura media global por encima de 20 grados centígrados supone el riesgo de que se deshiele gran parte de las zonas permanentemente heladas como Groenlandia, lo que haría subir siete metros el nivel medio mundial del mar.

Durante las próximas semanas, el equipo científico dirigido por la profesora Fiamma Staneo realizará un estudio oceanográfico del fiordo de Sermilik e investigará la llegada de aguas subtropicales cálidas a Groenlandia.

Por su parte, el segundo equipo de científicos en el Ártico, liderado por el profesor Gordon Hamilton, investigará el glaciar Helheim, al noroeste del fiordo de Sermilik.