La Diputación de Valencia no cambiará los instrumentos que donó a las bandas de la Ribera Baixa en la última convocatoria de las subvenciones en especie del «Retrobem la nostra música» 2013-14, el programa a través de la cual la institución que preside Alfonso Rus proporciona herramientas de forma gratuita a estas sociedades con el objetivo de que alcancen el mejor nivel en el desarrollo de sus interpretaciones.
Y ello, a pesar de que ocho entidades musicales de la Ribera beneficiarias se han quejado formalmente al ente provincial por la mala calidad de los mismos.
Sobre las quejas por la falta de montaje de algunos instrumentos, que ha obligado al Ateneu Musical de Cullera o a la Societat Instructiva Musical Santa Cecília de esa localidad a tener que llevarlos al taller para su ensamblaje, proceso que es más caro incluso que la compra, la diputación se desentiende y remite directamente a la empresa suministradora para solventar cualquier deficiencia, al mismo tiempo que agradece que se le hayan transmitido las quejas para de este modo poder hacer un correcto seguimiento del proceso. Aunque las bandas han demandado que se les faciliten otros instrumentos que se ajusten a los que esperaban en base al catálogo ofertado, la diputación les recuerda que el hecho de que el valor total de lo recibido esté por debajo de la subvención que a cada una les corresponde no da derecho a formular una nueva solicitud, quedando el dinero sobrante como remanente de la convocatoria a disposición de la institución provincial.
Como informara Levante-EMV este jueves, la Societat Unió Musical de Sueca, las cullerenses Ateneu Musical y Societat Musical Instructiva Santa Cecília, la Unió Musical de Benicull, la Societat Musical Santa Cecília de Fortaleny así como l´Associació d'Amics de la Música de Favara, l'Associació Musical Polinyanense y la Unió Musical de Riola alegan que los citados instrumentos no se ajustan a las características materiales prometidas.
En una rápida respuesta a las sociedades que han formulado la reclamación y a la que ha tenido acceso este rotativo, la diputación alega que tanto el precio como la descripción de las características constructivas publicadas en las bases no obligan a su estricto cumplimiento. El área provincial de Cultura defiende en un informe que el valor de mercado que aparece en las bases es meramente «orientativo».
