El equipo de gobierno de Nàquera, formado por los 4 concejales de Unión Popular de Nàquera (UPdN) y los 3 del PSOE, aprobó ayer en un pleno extraordinario aumentarse los sueldos el doble «porque también vamos a trabajar más y a aumentar las horas de dedicación a las tareas del ejecutivo municipal». Así, lo explicó ayer el alcalde Damián Ibáñez, de UPdN, que confirmó que en su caso pasará de cobrar 21.000 euros brutos, en 14 pagas, como entre 2011 y 2015; a percibir 38.439 euros anuales brutos, 2.745 euros brutos al mes. El máximo responsable municipal pasa también de tener 4 horas de dedicación diarias, para las tareas municipales a una dedicación del 85% al gobierno local. El resto de concejales de UPdN y del PSOE pasarán también de percibir 13.000 euros brutos anuales a 25.227, lo que dividido en 14 pagas representa 1.801 euros brutos al mes. Fuentes del equipo de gobierno confirmaron que estas retribuciones son únicas, «por la asistencia a pleno, comisión o dietas, no se percibirá ni un sólo euro de más».
Las mismas fuentes indican que durante el mandato ahora concluido, Damián Ibáñez «ha venido cobrando 1.500 euros brutos, lo que se traducía en 1.185 netos, a cambio de las 4 horas de dedicación diarias que tenía estipuladas por contrato». En la práctica, «el alcalde ha trabajado durante todo el día por Nàquera, también durante los fines de semana,con actos entre semana y festivos, sin escatimar esfuerzos, y estando disponible las 24 horas para la policía, protección civil y el resto de servicios municipales». «Lo mismo „subrayan las mismas fuentes„ que los concejales de UPdN y el PSOE, que estaban percibiendo entre 2011 y 2015, 800 euros netos, se supone por una media jornada, que en realidad han sido días completos de trabajo». Amén de duplicar estos ingresos, por la mayor cantidad de horas que van a dedicar en el nuevo mandato de 2015 a 2019 al consistorio, el equipo de gobierno justifica esta subida de sueldos, «en la buena gestión económica realizada y en los ajustes que hicimos hace 4 años». Por ejemplo,«cuando empezamos a gobernar „señala Ibáñez„, recortamos la partida de protocolo, los gastos en material fungible como folios o tinta, revisamos todos los contratos a la baja y aplicamos hasta 2 planes de ajuste». El resultado es que «hemos acabado 2012, 2013 y 2014 con superávits que suman más de 3 millones de euros y hemos podido pagar 2 millones más a proveedores, amén de cancelar préstamos».
¿Cómo se ha conseguido? «Por esa austeridad en las retribuciones a los concejales pero también por la reducción de tarjetas de gasolina y gasóil que existía cuando llegamos al ayuntamiento y por la reducción generalizada de gastos», señala el alcalde.
Pese a las explicaciones del alcalde, el incremento salarial de los cargos municipales ha sido muy criticado en las redes sociales y en ciertos sectores del pueblo.
