El éxito no está solo en el sold out, venía a decir ayer Davide Livermore al presentar la guinda shakespiriana de la temporada en Les Arts. El intendente incidía en el discurso que ha defendido en estos meses de mandato: un teatro público está también para educar a la sociedad que lo alberga y en ese camino no siempre se puede al 98 % de asistencia de La Bohème, defiende el intendente, partidario de programar títulos no siempre populares. «Tenemos que acabar con la lógica de la televisión basura: no estamos trabajando solo para el ahora», proclamaba Livermore. Esta vez, como con la Juana de Arco de Rosana Pastor o el Lélio recitado por Nacho Fresneda, el coliseo valenciano dejará entrar a una actriz ajena a la ópera, en este caso Rossy de Palma, para que se mezcle con la partitura de Mendelssohn-Bartholdy.

La actriz es uno de los ganchos para una apuesta que sigue la estela de la ópera de Britten, la cual se situó por encima del 60 % de ocupación, aunque tuvo una buena aceptación por parte del patio de butacas, con aplausos de casi diez minutos. «Es una obra para todo tipo de públicos, no solo el melómano», subrayaba el director José Miguel Pérez-Sierra, quien sustituirá a Ramón Tébar por un problema de salud de este último. «Mendelssohn capta la brisa», explicaba poético el encargado de dirigir esta noche a la Orquestra de la C. Valenciana tanto en El sueño de una noche de verano como en la Sinfonía 3, Escocesa, también del autor alemán.

Visita de Plácido Domingo

Así pues, esa brisa de Mendelssohn, puesta en escena por Álex Aguilera y con voz de la soprano Federica di Trapani y la mezzosoprano Elisa Barbero, clausurará el año en la ópera valenciana, a la que apenas le quedarán un par de epílogos durante la semana.

Al auditorio le queda, sin embargo, resolver los exámenes de final de curso para los candidatos a entrar en el Centre de Perfeccionament. Las pruebas se están llevando a cabo esta semana y Livermore comentaba que más de cien aspirantes de cuarenta países han acudido a por un puesto en Les Arts. Mañana será la última de las audiciones para los candidatos, que se enfrentarán a un tribunal en el que estará el intérprete que da nombre al centro, Plácido Domingo. Además, las audiciones serán por primera vez en abierto para el público, según anunció el intendente.

Quienes ya superaron su prueba fueron los 13 músicos que consiguieron una plaza en la Orquesta de la Comunitat Valenciana el pasado año. Hacia la formación dirigió Livermore gran parte de sus elogios y no eran gratuitos: los músicos que obtuvieron la plaza aún se encontraban a prueba; todos se quedan en la formación.