Los fotorrojos son un sistema punitivo y rápido y, no cabe duda, de que tras la multa tienen cierto efecto. No obstante, el investigador en Seguridad Viaria de la Universitat de València y vecino de Aldaia, Nacho Lijarcio, insiste en que se pueden dejarse las mejoras en movilidad solo en cuestiones tecnológicas o de sanciones.
Por contra, Lijarcio insiste en que la movilidad sostenible ha de abordarse como un planteamiento global, que tambié «va más allá de construir un carril bici o peatonalizar espacios». «Cuando los pueblos piensan en su desarrollo, en nuevas infraestructuras, tienen que pensar en una movilidad segura: cómo llegar y lo que contaminará. Un polideportivo en un polígono siempre provocará el uso del coche, por ejemplo. Y construir un Anell ciclista o poner en marcha una red de bicicletas no será efectivo si no se enseña a la gente a cómo utilizar esos nuevos elementos», valora este experto. Sobre los cursos de educación vial para niños y niñas, considera que no suelen ser adecuados. «De nada les sirve ir a un circuito y saber qué es un STOP si ellos no conducen coches. Tienen que aprender a utilizar la bici, donde pueden usar las distintas modalidades de patines», opina. Y sobre los planes de movilidad, anima a los consistorios a hacer encuestas ampliar y procesos participativos en los que se impliquen muchos colectivos.