Varios técnicos contratados por la entidad de certificación visitaron la playa de Sant Antoni el pasado 31 de julio para llevar a cabo la evaluación del funcionamiento y documentación de cada servicio del que dispone la zona. Estos fueron los encargados de determinar si se cumple la normativa, así como de comprobar que la playa cumple todos los requisitos establecidos para mantener el distintivo de calidad.
El concejal de Playas, Salva Tortajada, se ha mostrado muy satisfecho por la superación de este «difícil examen», y destaca que la Q de calidad «es fruto del trabajo y esfuerzo de muchas personas a lo largo de años para convertir las playas de Cullera en las mejores de la Comunitat Valenciana y de las mejores de España»
Cullera ya renovó la Q de calidad el año pasado y este ejercicio debía pasar una auditoría de seguimiento, que ya ha sido superada. El próximo año, la playa de San Antonio volverá a someterse a examen y se enfrentará a la renovación del certificado en 2017. La Q de calidad no sólo reconoce el respeto a los valores medioambientales y la sostenibilidad de los ecosistemas, sino que supone un reconocimiento de ámbito nacional que garantiza el servicio turístico de calidad, y tiene en cuenta la planificaión, organización, gestión de recursos, comercialización y proceso de control y mejora continua de la calidad turística. De la misma forma, también evalúa otros aspecctos, como son las medidas de seguridad y salvamento, la información a los usuarios, la limpieza, el mantenimiento de instalaciones y equipamientos, la accesibilidad, la higiene y el ocio ofrecido.
Actualmente la totalidad de las playas de Cullera cuenta con los certificados ISO 9001, ISO 14001 y Emas, así como la posesión de seis banderas azules en las playas, certificadas con bandera Qualitur, de la Escollera, Sant Antoni, Racó, los Olivos, Cap Blanc y Faro, siendo líder en la provincia.
