Desmantelan un criadero de gallos de pelea en La Punta

La Policía Local de València investiga a un matrimonio por maltrato animal y fraude de fluido eléctrico tras intervenir una veintena de gallos de combate y 60 huevos

Desmantelan un criadero de gallos de pelea en La Punta

Policía Local de València

«Qué bueno eres cabrón, tu primera pelea y matando a uno de los mejores gallos de España». Este mensaje en una conocida red social, acompañado de una fotografía en la que posan varios hombres orgullosos portando uno de ellos un gallo en sus manos, fue la pista definitiva para la Policía Local de València sobre las presuntas actividades ilícitas de maltrato animal en las que podrían estar involucrados un conocido clan familiar de Natzaret.  

Fruto de las investigaciones llevadas a cabo por agentes de la Séptima Unidad de Distrito, en colaboración con la Unidad de Bienestar Animal del Ayuntamiento de València y la Fiscalía de Medio Ambiente de València, ayer por la mañana se llevó a cabo un registro en un terreno vallado en la carretera Font d’En Corts, en la pedanía valenciana de la Punta, donde los agentes intervinieron una veintena de gallos de pelea, así como gallinas y 60 huevos fértiles, que estaban en diferentes gallineras preparadas para su crianza, para posteriormente ser utilizados presuntamente en peleas clandestinas.

El inmueble albergaba una caminadora de entrenamiento para aves, jaulas, medicación de uso animal y un ruedo de combate con restos de sangre

El inmueble escondía en su interior todo tipo de elementos y máquinas dedicados a esta práctica ilegal, como 60 jaulas de obra con tela metálica, una caminadora de gallos, transportines con un logo identificativo de las personas implicadas, marcadores serigrafiados, así como diversos fármacos de uso animal, según han indicado fuentes policiales.

Asimismo, el Juzgado de Instrucción número dos de València, en funciones de guardia, abrió diligencias como investigados a un matrimonio, por los presuntos delitos de maltrato animal y fraude de fluido eléctrico, ya que además estaban enganchados de forma ilegal a la red eléctrica.

Las jaulas donde tenían a los animales.

Las jaulas donde tenían a los animales. / Policía Local Valencia

Los investigados esgrimieron que se encuentran federados y pertenecen a la llamada Federación Valenciana de Criadores del Gallo Combatiente Español, que vela para que no desaparezca esta especie, aunque sin por supuesto reconocer que participan en peleas ilegales o clandestinas.

No obstante, las fuentes consultadas por este periódico aseguran que muchos de los gallos intervenidos tenían las crestas cortadas. Dicha mutilación de una parte esencial de su cuerpo supone un maltrato para estos animales, además de afectar a su sistema inmunitario.

Las investigaciones comenzaron el pasado 21 de marzo cuando una patrulla de la Policía Local siguieron a una furgoneta sospechosa hasta unos terrenos en la carretera d’En Corts. Los agentes se percataron que en el interior de una zona vallada y con un muro de obra, al parecer reciente, se escuchaba el cacareo persistente de varios gallos.

Así, tras varias averiguaciones y con la ayuda de la unidad de Drones, se realizó ayer el registro de dicha propiedad como ha adelantado en exclusiva este periódico. A este mismo clan familiar ya se le intervinieron otra treintena de gallos de pelea en junio de 2023.

Signos de mutilación

El inmueble registrado estaba dividido en cinco estancias. En la primera de ellas había 57 jaulas, 19 gallos y gallinas de combate, así como un gallo y una gallina en una única jaula, preparados para su reproducción. En un comunicado la policía ha remarcado que las aves presentaban signos de mutilación en las crestas, barbas afeitadas, muslos pelados, la golilla recortada y con déficit de peso. Los animales que presentaban heridas evidentes de haber participado en combates, presentaban un comportamiento agresivo y llegaron a atacar a los agentes cuando intentaban retirarlos de las jaulas, que tenían los comederos completamente vacíos.

En la segunda habitación se encontraron más jaulas, trofeos, transportines, una gallera o ruedo de combate con restos de sangre animal, así como una caminadora de gallos metálica con capacidad para cinco gallos y usada para incrementar la capacidad física y resistencia de las aves. La Policía Local decomisó en este lugar medicación para las aves como antibióticos, vitaminas, cremas, pomadas; unos 1.200 marcadores para las alas de las aves, serigrafiados con el apellido de la familia; protectores para patas, cuellos y bandas elásticas para los picos.

En el resto de estancias se hallaron más jaulas, dos perros potencialmente peligrosos de la raza American Bully, una gallina y un pollo suelto, además de un gallo, una gallina y cuatro polluelos, estos últimos sin vida. Las aves vivas de combate se trasladaron al Centro de Aves, Avifauna Urbana y Especies Exóticas del Ayuntamiento de València, para identificarlas, valorarlas individualmente y evaluar las heridas.