En 2015 se crearon entorno a 2.500 startups en España „según Startupxplore„, cifra que reafirma la convicción de que esta nueva tipología de empresas se empieza a perfilarse como una opción profesional.

Detrás de una startup siempre hay un creador. El perfil del emprendedor medio valenciano se define como hombre de 34 años, con estudios universitarios y con experiencia en la actividad emprendedora.

El «Mapa del emprendimiento» de South Summit analiza el patrón general de un emprendedor medio poniendo en común 1.534 proyectos procedentes de la Startup Competition de la plataforma, de los cuales el 61 % son españoles.

Una de las conclusiones más relevantes versa sobre la equidad entre hombres y mujeres. La desigualdad entre ambos géneros siempre ha estado presente en el ámbito laboral „datos de desempleo, salarios o puestos directivos, ya que en España del total de puestos de dirección de las grandes y medianas empresas, únicamente el 26 % los ocupan mujeres„, pero por lo que respecta a emprendedores y creadores de startups, esta diferencia se acrecenta todavía más.

Del total de startups en el panorama valenciano, el 89 % de los creadores son hombres, frente al 11 % de mujeres emprendedoras „17 % en el ámbito nacional. Sin embargo, una vez creada la startup, ellas consiguen una mayor viabilidad y longevidad del negocio. El índice de fracaso es menor en las mujeres que en los hombres: Un 48 % en el caso de ellas frente al 66 % masculino.

Al igual que startup es un término novedoso y que emprender no se consideraba hasta ahora como una plena opción profesional, el emprendedor prototípico también es una figura reciente. Por ello, la edad media del emprendedor valenciano es de 34 años „a penas el 2 % del conjunto de emprendedores españoles es mayor de 55 años„, edad cada vez más temprana si se compara con los 35 que expuso el mismo análisis del año pasado.

En cuanto a los estudios previos, la plataforma defiende que la startup tiene que ser «intensiva en formación». La gran mayoría de los emprendedores valencianos (96 %) tiene estudios universitarios, de los cuales el 45 % son ingenieros especializados, según el análisis de la plataforma europea. El 3 % restante ha cursado educación secundaria o formación profesional.

El afán por emprender es insaciable. Tal y como muestra South Summit, más de la mitad „el 51 %„ de los emprendedores tiene experiencia previa en la creación de startups, ya que ha puesto en marcha otra „u otras„ anteriormente. La ocupación previa de los emprendedores es, en líneas generales, por cuenta ajena.

El 11 % se dedicaba a los estudios, lo que deja entrever la juventud de los creadores. Únicamente el 1 % era desempleado, lo que significa que solo este número de creadores se decidió por necesidad. Según la plataforma europea, el 62 % afirmó que siempre había querido emprender. Tal y como presentan los datos, el principal motivo para poner en marcha un proyecto es haber visto «una oportunidad real de negocio», según afirmaron siete de cada diez emprendedores valencianos.

Las startups apuestan por un equipo de trabajo cada vez mayor. Según el estudio, las empresas con más de cinco trabajadores han aumentado en España del 16 % al 32 % „en la Comunitat Valenciana la cifra está en un 27 %„, mientras que las firmas con menos de cinco trabajadores han disminuido hasta el 48 %.

Cambios en la financiación

La financiación se ha convertido en el principal reto para los emprendedores, ya que la tienen que buscar ellos mismos. En la C. Valenciana, el 21 % de los recursos de las startups emanan de fondos privados, créditos bancarios o crowfunding, fruto de la profesionalización. A pesar de ser menos en número, las mujeres son las que más invierten en la creación de una nueva empresa „entre 50.000 y 500.000 euros. La buena noticia para los emprendedores es que, en apenas once años, la inversión media necesaria se ha reducido más de cuatro veces hasta alcanzar los 11.600 euros en 2015 „48.200 euros en 2004.

Los resultados de facturación de las startups están mejorando con el paso de los años. En España se espera que este año se triplique el número de startups que obtengan entre 150.000 y 500.000 euros „el año pasado solo lo consiguió un 5 %. En la Comunitat Valenciana, el 24 % de los proyectos espera facturar entre 50.000 y 150.000 euros.

Las preocupaciones de los emprendedores valencianos giran entorno a la necesidad de crecer. Según el «Mapa del emprendimiento», al 17 % le preocupa la visibilidad en el mercado y los contactos que de ello puede beneficiarse; un 15 % se decanta por acceder a programas de aceleración y un 10 % apuesta por fuerza de trabajo con talento.

Otro de los objetivos de muchos emprendedores es utilizar las startups como un trampolín para llegar a ser empresarios. Hasta el momento, sólo un 17 % de las iniciativas españolas han alcanzado la fase «growth». Para ilustrar las posibilidades de esta transición, la plataforma ha expuesto que el 64% de startups de la Comunitat Valenciana ha fracasado y un 19 % fue vendida.

La fundadora de Spain Startup-South Summit, María Benjumea, considera que estos cambios se traducen en un cambio en la mentalidad del emprendedor, que ya no «sólo busca capital». Además, la presidenta considera que el panorama actual «obliga a los emprendedores a luchar por darse a conocer y encontrar partners estratégicos».