Layhoon Chan exprime su tiempo en Valencia. La presidenta, que tras la salida de Amadeo Salvo ha asumido también las tareas que desempeñaba el presidente ejecutivo, quiso ayer tranquilizar a los trabajadores del club garantizándoles su puesto de trabajo. Pero les anunció que, en breve, se producirá una reestructuración para hacer del Valencia «un club más eficiente». La propiedad busca, les incidió, «mejorar el club». Y todo ello desde un modelo continuista porque, les felicitó, el club funciona «muy bien».

La salida de Amadeo Salvo, el consejero Manolo Peris y seis de los miembros del área deportiva que encabezaba el hasta el miércoles mánager general Francisco J. Rufete, defendió Layhoon ante los trabajadores del club, no ha sido tomada por la propiedad sino que, incidió, ha sido una decisión personal de los ya exempleados. Esto, justificó, debería servir para que «nadie» tema por su contrato laboral. «Calm», esa fue la palabra que más empleó la singapurense y que el traductor más veces pronunció: «tranquilidad».

Tras las dimisiones del miércoles, ayer a primera hora de la mañana, la presidenta trasmitió su intención de reunirse de forma inminente con todos los trabajadores del club. Y así fue.

Layhoon Chan, desvelan, había detectado una cierta preocupación entre los trabajadores y decidió zanjarlo. ¿Cómo? Presentándose ante todos ellos y hablándoles de forma directa. Y a todos, desenvolviéndose en ingles, les dejó claro que quien manda en la empresa Valencia CF es Peter Lim y ella quien toma las decisiones. La presidenta, primero se citó con todos los empleados que realizan su trabajo en las oficinas y, a la una del mediodía, con los que habitualmente acuden a la Ciudad Deportiva.

Layhoon Chan, acompañada del consejero Kim Koh, llegó a Paterna minutos antes de las doce del mediodía. Muy sonriente y con un bolso de mano rosa, vestía pantalón beige, camisa amarilla y unos altos zuecos marrones. Allí, ya sin la habitual compañía de Amadeo Salvo, supervisó las obras de mejora que se están realizando en el edificio central y se preocupó por cuándo estos trabajos iban a estar finalizados.

En la explanada, la presidenta y el consejero, se cruzaron con Dani Parejo que junto a un amigo, había acudido a Paterna para recoger de su taquilla unos objetos personales. A partir de entonces, y como si de un goteo se tratara, empezaron a llegar los trabajadores al recinto. En el Media Center se llevó a cabo la reunión.

Los miembros del cuerpo médico, los fisioterapeutas, el delegado Voro González, el entrenador del filial Curro Torres, los miembros del departamento de prensa, los profesores de la Academia, jardineros, oficinistas y operarios en general se acomodaron en la sala de prensa para escuchar las explicaciones de una fría Layhoon Chan. Pero, antes de que llegara la presidenta, lo hizo Amadeo Salvo junto a su leal Manolo Peris. Sonriente y ya desquitado de cualquier tipo de presión, Salvo agradeció a los trabajadores su trato y apoyo durante los dos años que había estado al frente del club.

La reunión, en la que el medio centenar de trabajadores presentes despidieron al expresidente con un espectacular aplauso, sólo duró veinte minutos. A la salida, los trabajadores compartían sus dudas.

Conscientes de que cualquier cambio estructural implica otros cambios, los empleados más preocupados por lo que pueda ocurrir en los próximos meses eran los que están desempeñando su trabajo en la Academia. En los últimos años ha sido Francisco J. Rufete quien ha tratado por todos los medios de modernizar la cantera y dotar a la Academia de más medios. Con esa intención, el exjugador diseñó una ambiciosa estructura con un modelo similar a La Masía. Con el proyecto ya consolidado, Rufete asumió el cargo de mánager general pero, siempre, muy pendiente de todo lo que le ocurría en la cantera. Ahora ese proyecto „por el que Salvo apostó desde el primer día y al que dotó de más partida en el presupuesto„ queda descabezado a la espera de ver qué ocurre o qué decisión toma la propiedad con ella. De ahí la incertidumbre. Ayer, a primera hora de la mañana, varios padres se presentaron en la Ciudad Deportiva, y otros muchos llamaron para interesarse por lo que estaba ocurriendo y por el futuro que les esperaba a sus pequeños. Respuestas que, desde el club, no se pudieron dar aunque sí que se trasmitía tranquilidad y continuidad. Algunos padres consideran que la amistad de Peter Lim con el agente Jorge Mendes, a la larga, va a frenar las aspiraciones de sus hijos por llegar al primer equipo.