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"La prohibición de fumar perjudicará seriamente la noche". Con este mensaje de advertencia, cuyo diseño reproduce el de la publicidad de las cajetillas de tabaco, los empresarios del ocio nocturno de Valencia, Madrid y Barcelona se han unido en una campaña que, bajo el lema "Defiende la noche", aspira a que el Gobierno de marcha atrás en su propuesta para endurecer de la Ley del tabaco.

Entienden que la prohibición total de fumar en "pubs", discotecas y en toda la serie de locales en los que se divierte la gente tras la cena será, en palabras de Stephanie Pitarch, la presidenta de la Asociación de Discotecas de Valencia, "la catástrofe" para un sector que ya ha visto como la crisis ha mermado su facturación en un 30%.

Desde el colectivo del ocio nocturno aseguran que si el Ministerio de Sanidad les obliga a colgar el "prohibido fumar" en los locales, sus ingresos caerá otro 15%. El presidente de la Asociación de Pubs de Valencia, Antonio Navarro, pone números a lo que consideran un despropósito: "Si el borrador de la reforma de la Ley del tabaco no se cambia, 400 de los 3.000 "pubs" , discotecas y locales de ocio nocturno que hay en la Comunitat Valenciana no tendrán más remedio que bajar la persiana, las ventas se reducirán en 350 millones de euros y se perderán 2.000 puestos de trabajo".

Pero, ¿En que se basan estos cálculos? Desde la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia (FEHV) que dirige Juan Carlos Gelabert, la tercera entidad valenciana que junto a "pubs" y discotecas han lanzado la campaña "Defiende la noche", explican que cuatro de cada 10 de los clientes de los locales de ocio nocturno son fumadores, a los que hay que añadir los fumadores de "fin de semana", con lo que señalan que la prohibición reducirá el tiempo de estancia en los locales, y por tanto las consumiciones que por la crisis ya han caído de 2 a 1,2 de media por local, así como las salidas mensuales, que también han bajado al pasar de cuatro a dos o tres.

"Más ruido en la calle"

Todo esto, según Gema Piqué, de la Comisión de Ocio de la FEHV, "hará que aumente el "botellón" y el ruido en las calles, pues la gente saldrá a las puertas de los locales a fumar, así como las fiestas en las casas, con las consiguientes molestias para los vecinos". En este sentido, Navarro, alerta que la abolición "será el perfecto compañero del "botellón"". Gelabert aboga porque la ley "se mantenga como está" o se estudien modelos de "convivencia entre fumadores y no fumadores" como el alemán o el francés.

También reclama que la rendija abierta en el borrador de la reforma que ha redactado el ministerio, que permite fumar en salas de fiesta en los horarios que sólo acceden mayores de 18 años, se amplie al resto de locales de ocio nocturno en los que no se permite entrar a menores.