El Ayuntamiento de Valencia aprobará en la Junta de Gobierno Local de hoy destinar una partida de casi un millón de euros para reforzar el servicio de limpieza de las calles de la ciudad. En julio ya se aprobó una partida extraordinaria de 242.000 euros para incrementar las labores de limpieza en la zona 3 de la ciudad, la que comprende Quatre Carreres y Poblats Marítims, y así se completa el «plan de choque» que pretende mejorar la imagen y la salubridad de toda la ciudad. Así, ahora se beneficiarán de esta inversión la zona 1 de la ciudad (del Jardín del Turia hacia el norte, incluyendo pedanías) y la zona 2 (del río hacia el sur, incluyendo pedanías). En total, se invertirán 912.549,47 euros: 520.628 euros para la primera y 391.921 a la segunda.

Esta inversión se traducirá en la zona sur en cinco equipos de baldeo y una cisterna exclusiva para las pedanías, 20 operarios para la limpieza manual, 5 barredoras mecánicas y 3 barredoras con seis operarios. Además, se añadirán dos unidades para el lavado de contenedores y una brigada polivalente para festivos. A la zona norte se destinarán 4 cisternas para el baldeo, 16 operarios de limpieza manual, dos barredoras mecánicas, y otras dos barredoras con tres operarios para limpiar la caída de hojas. Esta zona también contará con un nuevo equipo para la recogida de enseres abandonados y otro equipo de lavado de contenedores.

Ese casi millón de euros de inversión proviene, según explicó ayer la concejal de residuos sólidos Pilar Soriano, de una «regularización de la forma de pago de los contratos» con la adjudicataria de la limpieza. Según denunció Soriano, han descubierto que entre 2008 y 2011 en la zona sur y entre 2008 y 2013 en la zona norte hubo irregularidades en el pago a la empresa que tiene la concesión de la prestación de estos servicios. Al parecer, el contrato programa establece que los pagos a este empresa deben hacerse prorrateados hasta el año 2020, en el que finaliza la contrata. Sin embargo, en ese periodo de tiempo la concejalía, cuando estaba en manos del popular Ramón Isidro, pagó al contado casi un millón de euros en contra de lo establecido legalmente. «Eso supone un grave perjuicio para las arcas del consistorio porque ese dinero podría haberse utilizado para ofrecer otros servicios a la ciudadanía en vez de entregarlo a la empresa», argumentó la concejal. En lugar de reclamar la devolución de esos pagos, el consistorio ha acordado con la concesionaria que ese dinero se «permute» por la prestación de estos servicios que hoy se aprobarán, dado que el dinero ya estaba en manos de la empresa.

Al Partido Popular no le ha gustado este anuncio y cree que se trata de «juegos malabares» que no ofrecen nada nuevo. La ex concejal de limpieza, Mª Ángeles Ramón-Llin, criticó que el actual equipo de gobierno tenía «margen para actuar en la limpieza» gracias a su gestión e insistió en que ella personalmente inició las negociaciones con la contrata para recuperar ese millón de euros. Ramón-Llin aseguró además estar «indignada» con las declaraciones de Soriano porque, dijo, fue ella quien puso fin en 2012 a la mala gestión de los pagos que había llevado a cabo con esta contrata el anterior concejal.