La Empresa Municipal de Transportes está estudiando la posibilidad de reducir el número de líneas que atraviesan el centro histórico de la ciudad, situación que en la actualidad provoca que numerosas paradas se colapsen con la llegada de varios convoyes, como sucede en la plaza del Reina o la plaza del Ayuntamiento. En ningún caso, asegura la compañía, se reduciría el servicio a los ciudadanos, sino que apostarían por crear intercambiadores de líneas en el perímetro de Ciutat Vella, desde donde saldrían lanzaderas rápidas que transportarían a los vecinos a la zona más emblemática del cap i casal.

El gerente de la compañía, Josep Enric Garcia Alemany, explica que en su plan de remodelación completa de la red de la EMT durante los dos próximos años se está estudiando la posibilidad de reducir el número de líneas que llegan al centro. Así, se usarían lanzaderas „preferiblemente autobuses eléctricos„ que recogerían a los usuarios en diferentes puntos de la ronda interior y los dejarían en las paradas que están repartidas por toda Ciutat Vella. «Serían lanzaderas pequeñas y con frecuencias muy rápidas, cada dos minutos aproximadamente. Esto lo haremos con un proceso de participación con los trabajadores de la empresa y los ciudadanos», explica Garcia Alemany.