Dentro del plan de revitalización del barrio, Fuset subrayó la intención del ayuntamiento de atraer el turismo a esta zona de València. Recordó el convenio con el Gremio de Artistas Falleros para reabrir el Centro de Documentación Fallera, «especialmente importante ahora que las Fallas son patrimonio de la humanidad» . Además, enumeró algunas de las medidas para favorecer «el turismo inclusivo» en el museo del artista fallero, con la reserva de plazas para personas con movilizad reducida, así como un ascensor que permite acceder al museo a las personas en sillas de ruedas. También aludió a la realización de intervenciones artísticas en el entorno de «un barrio muy especial».
Vicent Sarrià se refirió a un aspecto esencial que es «conseguir que el propio espacio de la Ciutat del Artista Fallero sea atractivo para visitar», y declaró que es aquí cuando el aspecto urbanístico influye, por iniciativas como dejar espacios en la vía pública para que los artesanos puedan trabajar en la calle los monumentos.
Por otro lado, el barrio cuenta con el Parque de Benicalap, «un parque del sistema general de primer orden» donde se encuentran elementos patrimoniales muy importantes como el Casino del Americano o la alquería de La Torre. Además, la ampliación de la zona verde contará con carril bici que conectará con el mar y con las zonas de huerta. Se concibe este espacio como un lugar donde realizar actividades deportivas.
