El milagroso truco para dejar como nuevos los grifos de la cocina y del baño

Además, los protege contra el agua y previene manchas de cal y la aparición de sarro

El milagroso truco para dejar como nuevos los grifos de la cocina y del baño

El milagroso truco para dejar como nuevos los grifos de la cocina y del baño

Quien tiene costumbre de limpiar a fondo el baño y cocina sabe que existe una auténtica bestia negra. Junto con el plato de ducha y el inodoro, los grifos son otro de los elementos que más se ensucian en el día a dia y que más cuesta limpiar. Aunque existen productos comerciales (y bastante abrasivos) que consiguen eliminar restos de cal y sarro, lo cierto es que es conveniente recurrir a trucos o soluciones menos agresivas y más naturales. El vinagre y el bicarbonato es una de ellas. Su acción antical elimina la suciedad y garantiza el brillo. Sin embargo, existe otro truco más que permite dejar los grifos relucientes a prueba de manchas de agua.

Puede parecer inverosímil o directamente contraproducente pero no lo es. Quien usa este truco a diario asegura que el resultado final es increíble. Una vez eliminadas las manchas de óxido y cal es el momento de aplicar este sorprendente y barato truco.

Solo necesitas una vela de cera y un paño de algodón limpio.

El milagroso truco para dejar como nuevos los grifos de la cocina y del baño

El milagroso truco para dejar como nuevos los grifos de la cocina y del baño

Cómo usar una vela de vera para limpiar los grifos

Con la superficie de los grifos totalmente seca solo hay que frotar el grifo con la vela hasta conseguir cubrir tods su superficie con una fina capa de cera. Después de este paso es momento de retirar el exceso de cera y lograr un efecto de pulido con el paño de algodón. Hay que frotar concienzudamente con el paño de algodón limpio poco a poco pero con constancia para conseguir que le capa de cera desaparezca.

El resultado es sorprendente. Los grifos quedan brillantes y, además, protegidos del agua. La cera crear una imperceptible microcapa hidrófuga sobre la superficie metálica de los grifos que la impermeabiliza del agua y, por tanto, de las manchas de humedad.