El pequeño Adrián ha fallecido estos días víctima del cáncer que padecía y contra el que luchaba desde hace varios años. El niño que quería ser torero vio cumplido su sueño durante una corrida homenaje en la plaza de toros de Valencia. El acto benéfico para recaudar fondos destinados a una fundación oncológica congregó a diversas figuras del toreo como Enrique Ponce, Vicente Barrera o Vicente Ruiz "El Soro". Todos estaban allí para darle su apoyo y su cariño.

Cuando éramos pequeños muchos de nosotros hemos querido ser futbolistas, bomberos o médicos. Luego el destino ha tenido la última palabra. Adrián lo tenía claro desde el principio: Quería ser torero, aunque ello le acarreara todo clase de insultos y descalificaciones, por elegir una profesión tan digna como otra cualquiera.

La imagen del pequeño Adrián a hombros, sosteniendo un sombrero, mientras daba la vuelta al ruedo fue cruelmente utilizada desde las redes sociales por antitaurinos para lanzar toda clase de atrocidades contra el pequeño y su familia, incluso, hasta desearle la muerte.

Los hechos fueron denunciados en el juzgado, pero nadie ha sido condenado por difundir tanto odio.

Por desgracia Adrián ya no está aquí para ver cumplido su sueño, pero seguro que allí donde esté encontrará un lugar para hacerlo realidad.

Un fuerte abrazo a la familia.