Ataviado con traje y pajarita, y tras unos sorbos de su habitual bebida de malta y café, Joaquín Martínez comienza a entonar un par de notas para ponerse en situación. A sus casi 73 años, Joaquín, murciano de nacimiento y torrentino de adopción, puede alardear de ser una de las personas que más vídeos suyos ha volcado en internet, con cerca de 2.750 grabaciones, algunas de ellas récord de visitas en Youtube, como la del "Abuelo profesor de música", con 22.000 reproducciones.

"En 1996, cuando por mi vida no daba ni una peseta, tres acontecimientos llegaron a ella. La jubilación, Internet y saber vivir." Así describe Joaquín Martínez el momento en que decidió dedicar todo su tiempo libre a recopilar y grabar canciones, desde zarzuela hasta villancicos, pasando por todo tipo de música del folclore popular.

Este vecino de Torrent ha logrado ganarse el afecto de miles de internautas con sus divertidos vídeos y, pese a las críticas a su lírica musical, ya cuenta con un club de fans que le apoya en esta aventura digital. "Más del 95% de la gente me apoya; son sólo unos pocos los que me critican o se ríen de mí", explicó Joaquín, quien sostiene que no le importa lo que digan algunos, pues "soy feliz con lo que hago".

"Yo como disfruto es cantando; para mí la vida es cantar", asegura el septuagenario. De ahí, no es de extrañar verlo por las calles de Torrent, en su paseo diario al Vedat, tarareando alguna canción o entonando las letras musicales de alguna obra clásica. "Va cantando opera por la calle, con dos bastones de la nieve, dice que le va bien para las piernas", explicaba Trini, vecina del municipio.

Masajista y auxiliar de geriatría

"Le debo mi vida a Internet", confiesa Joaquín, ya que mientras otros hubieran optado por rendirse ante el aburrimiento de la jubilación y sucumbir a la inactividad de la vejez, él halló en la red un mundo inmenso que explorar a través del tecleo del ordenador. "Cuando me jubilé estaba casi inútil y tenía problemas en la mano izquierda", explicó. "Pero yo tenía que hacer algo; si no haces nada las manos se van anquilosando", añadió.

Al principio realizó dos cursos como masajista e incluso estudió para auxiliar de geriatría. "Para conocerme a mí mismo, los achaques propios de la edad", apuntó hábilmente el septuagenario. Sin embargo, estas dos actividades no saciaron su sed de vitalidad. Fue entonces cuando descubrió la que sería su vocación en los años venideros.

Cayó en sus manos un libro recopilatorio de canciones populares, "Cancionero general del franquismo", con cerca de cuatrocientos temas. "Aquí se produjo el milagro", confiesa. Joaquín se percató de que muchas de esas canciones ya las conocía y que ahora con las letras en la mano era capaz de cantarlas. Amante de la música desde siempre, incluso presume de haber cantado ya en el vientre de su madre, Joaquín comenzó a entonar las canciones y a grabar sus interpretaciones.

"En marzo de 1996 me compré un ordenador, los otros que había tenido eran un poco de juguete, y me regalaron tres meses de internet gratis", recuerda este vecino de Torrent. A partir de entonces combinó la música con esta nueva afición, la computadora o PC, como él le llama.

Un "encargo" de Alfredo Kraus

Otro hecho que marcaría su vida y que le llevaría a volcar en Youtube todas sus interpretaciones fue la muerte del tenor Alfredo Kraus. "Antes de morir, Alfredo Kraus me dejó un encargo: que cuidara de la zarzuela", asegura el septuagenario, quien no llegó a conocer personalmente al artista español porque no se atrevió a pedirle un autógrafo.

Joaquín, que comenzó a cantar en el coro polifónico del Círculo Católico de Torrent, reconoce que al principio las grabaciones no le salían muy bien. "Tenía un problema: no sabía entonar, conocía las notas pero nunca había dado clases de canto", argumenta. Ahora, tras años de aprendizaje autodidacta, es él quien da clases a otros ciberalumnos a través de sus vídeos en la red.

A raíz de estas curiosas grabaciones volcadas en el portal www.youtube.com/user/JOAQUINMI101, este hombre de 72 años saltó a la fama y comenzó a ser conocido por miles de internautas. Su popularidad se vio acrecentada con las esporádicas apariciones de sus vídeos en el programa de Buenafuente, donde acudió como invitado la pasada semana.

En este programa de televisión era conocido de forma cariñosa como "el abuelo de las mandarinas", ya que en muchos de sus vídeos aparecía tras él un frutero lleno de naranjas. Para paliar la confusión el programa le regaló un carro con cerca de 100 kilos de naranjas. En otro buen gesto de este hombre, que jamás pierde la sonrisa, decidió donar las frutas al Cotolengo de Barcelona.