A punto de finalizar, la Fira d'Agost de Xàtiva disfrutó ayer -así es el calendario, que la fija siempre del 14 al 20- de su primer fin de semana. Los feriantes califican esta actual edición como la más floja en ventas de todos los años de la crisis, desde 2008. Sólo fue bueno el día 15 (festivo) pero flojísimos el jueves y el viernes. Por ello esperaban que el sábado y el domingo ayudaran un poco a levantar el vuelo, ya que el fin de semana anterior la feria ya estaba montada pero no funcionaba oficialmente. Saber una cifra es tarea casi imposible, pero feriantes del juguete (hay doce puestos, uno de ellos fijo desde 1977) y de bolsos y complementos se aventuran a decir que la venta ha bajado alrededor de un 20 %.

Vendedores veteranos como los de bastones (Martínez, de Jarafuel) o los puestos de venta de jamones y quesos de Galicia explicaron ayer a Levante-EMV que "pasa mucha gente por delante de las paradas, muchísima. Pero no ves a casi nadie con bolsas o comprando. Sólo mirando", comentaban ayer, resignados.

La Fira d'Agost termina mañana con un recital de Al Bano en el campo de fútbol. Al ser una convocatoria totalmente abierta, la organización estima que entre la grada y las sillas colocadas en el terreno de juego, además de los espacios libres de los laterales, pueden acudir a La Murta alrededor de 8.000 personas. El año pasado esta mista cita, coronada con un concierto de Raphael, desbordó las previsiones y al recinto deportivo acudieron más de 10.000 espectadores. El recital tendrá lugar después de la ceremonia protocolaria de despedida de Eva Martínez, Reina de la Fira de 2012, y de sus damas de honor.

La Fira de Xàtiva -sin posibilidades de expansión, ya que la edificación en solares contiguos ya no lo permite- ha explorado este año nuevas posibilidades para extenderse. Y han fracasado. La instalación de una pista de coches de choque en plena carretera N-340 (vía que, lógicamente, ha tenido que ser desviada) ha generado las protestas de la oposición y de no pocos vecinos. También se han dado permiso en calles cercanas a las avenida principal, pero las pocas paradas que se han instalado en ellos no han tenido éxito comercial, indicaron.

Mucha improvisación

Con todo, el programa ferial ha sido el que se ha llevado la palma en la desaprobación. La de 2012 -si se obvia que el gran recital de todos los años se ha cambiado por un festival indie- ha sido una programación sin ningún acto nuevo. Y pese al cambio de concejal (la asumí Ramón Vila) la feria se ha montado con una precipitación fuera de lo común.