Una grabación que muestra una pelea o entrenamiento de perros de pelea en un descampado de la parte alta de l'Alquerieta propició que ayer se practicaran en Alzira las primeras detenciones por un presunto delito de maltrato animal relacionado con la celebración de estas bregas ilegales en la ciudad. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron en el barrio de l'Alquerieta a cuatro miembros de una misma familia, dos de ellos menores de edad, por su presunta relación con la pelea que recogen las imágenes que, al parecer, habrían servido para identificar a alguno de ellos. La detención es producto de un trabajo previo realizado por la Policía Local, que ha venido realizado un seguimiento tras la aparición en los últimos años en Alzira de varios canes con signos evidentes de haber sido utilizados en peleas y que había recibido las imágenes en las que se observa cómo se azuza a dos perros para que riñan en las inmediaciones del centro de Protección Civil.
Los colectivos animalistas y los propios vecinos de l'Alquerieta han venido denunciando en los últimos años la organización de este tipo de peleas, en las que se realizan apuestas, aunque fuentes policiales confirmaron ayer que hasta el momento no se había practicado ninguna detención por este motivo.
La aparición de Xena, una perra encontrada a las afueras de la ciudad con múltiples desgarros y dentelladas en abril de 2013, provocó que el ayuntamiento se dirigiera a la Fiscalía solicitando la apertura de una investigación, en la que trabajaron tanto el Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil como la política autonómica, aunque la denuncia fue finalmente archivada ante la dificultad para identificar a los autores.
Ya este año, la alcaldesa de Alzira, Elena Bastidas, volvió a anunciar la interposición de otra denuncia para que el Ministerio Público reabriera la investigación por la presunta celebración de peleas de perros en Alzira tras la aparición de tres animales con heridas propias de haber sido utilizados en estas refriegas con apenas quince días de diferencia.
