Una vez finalizada la primera fase de los trabajos arqueológicos, se procederá a intervenir en la estructura conservada para restaurarla y salvaguardarla. Aquí, intervendrá el arquitecto Tirso Ávila, especialista en consolidar este tipo de estructuras. Paralelamente, junto a los elementos descritos de la torre han parecido una gran cantidad de piezas cerámicas. Según narra el arqueólogo Juan José Ruiz, «se trata de platos, ánforas, colmenas y otros elementos usados en los hogares de la época, exportados desde la región de Ática, en Grecia, del siglo IV a.c.; y desde el sur de Italia, del siglo II. a.c., de Campania». La existencia de estos utensilios cerámicos demostraría el dinamismo comercial del poblado del Torrejón con la costa valenciana de entonces. Por ende, la magnificiencia de la torre hallada habla del poderío económico y social de este poblado, que ocupaba unos 3.000 m2 y que ofrece grandes posibilidades turísticas en el futuro. J. M. V. gátova
